La guerra de los smartphones

T Mobile G1, iPhone, Nokia N96, Zune Mobile… unos ya están y otros llegarán pronto para revolucionar uno de los segmentos más activos de la arena tecnológica. Hay mucho en juego y nadie quiere arrojar la toalla. Eso sin contar con las operadoras que saben lo estratégico que es que los usuarios consuman Internet móvil para evolucionar su negocio.  Y los desarrolladores de software.

Sin duda, 2008 se está caracterizando, además de por la crisis, por los continuos movimientos en el segmento de los móviles de alta gama, también conocidos como smartphones. Sin duda, el iPhone 3G de Apple ha sido el revulsivo para que compañías tradicionales y otras que no tanto en este nicho, gasten recursos en desarrollo y planteen alternativas. Solas o acompañadas de los otros grandes jugadores, las operadoras telefónicas, ávidas de elementos diferenciadores que lleven a los usuarios a valorar su propuesta.

Nosotros hemos elaborado un breve informe en el que intentamos repasar el momento actual de los principales fabricantes. Este especial se irá ampliando con revisiones de las operadoras y de las empresas de software que cada vez ven más estratégico el desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles.

Después del iPhone, llega el gPhone

El pasado 23 de septiembre, con una puesta de escena al más puro estilo Apple, con los fundadores de Google entrando en patines, se presentó en sociedad el T-Mobile G1, un dispositivo que marcaba un paso adelante en el Internet móvil. Este smartphone, conocido popularmente como el gPhone, ha sorprendido por prestaciones -no por diseño- a toda la comunidad de expertos. Y es que es el primero basado en Android, el revolucionario sistema alternativo liderado por Google.De este lanzamiento hablamos largo y tendido en MuyComputer (prueba a poner G1 en nuestro buscador y lo comprobarás).

El último en apuntarse a la fiesta es HP, consciente de que su línea de PDAs otrora clásica, las iPAQs, va camino de llegar a vía muerta si no se convierte en un competitivo teléfono todotereno. Los profesionales actuales necesitan una poderosa agenda de bolsillo, sí, pero que integre el teléfono, y garantice el acceso a Internet en cualquier condición. Las alternativas actuales, desde el iPhone a cualquier modelo de Blackberry, son más atractivas por diseño y prestaciones. Por otro lado, para competir en esta categoría, también hay que integrar numerosos elementos de consumo como players multimedia o incluso juegos. Y es que la barrera entre ocio y negocio está bastante rota. En definitiva, aunque, en el bando de su aliado Microsoft y gobernado por el ya «viejo» Windows Mobile 6.1, HP necesita un buen golpe de efecto si quiera ser de verdad un suministrador en este mercado que, por otro lado, tiene unas previsiones de crecimiento espectaculares en los próximos años.

Otro gigante que deshoja la margarita por jugar, como su enemigo Apple, directamente en este mercado es Microsoft. A Steve  Ballmer le pide el cuerpo guerra. Y a pesar de negarlo numerosas veces, ya se da por hecho que el denostado Zune acabará siendo poderoso móvil gobernado por Windows Mobile. Por cierto, esta plataforma necesita un golpe de efecto para no perder comba frente a los RIM, Amdroid, iPhone o Symbian.

Cuidado con RIM (Blackberry )

RIM, el popular fabricante de Blackberry, también ha echado el ojo a este segmento, eso sí, sin perder a su comunidad de ejecutivos enganchados a su particular forma de entender el correo push. Además de la Blackberry Bold que hará furor por su diseño estilizado y su pantalla táctil, está desarrollando modelos que, sin perder sus funcionalidades específicas, desarrollen más el aspecto multimedia tan buscado en el iPhone.

Y es que, aunque en ventas el rey indiscutible es Nokia, el smartphone más fashion es sin duda el iPhone, otro gran protagonista de las páginas de MuyComputer. Poco vamos a decir en este informe sobre este móvil que ha creado escuela. Nos remitimos directamente a nuestro análisis, uno de los más completos en castellano.

Nokia, el líder, no se queda quieto. Incluso fanfarronea que el fenómeno iPhone le ha venido bien para construir una nueva línea de mercado dentro de los móviles táctiles. De hecho ataca el segmento alto con el N96 (la versión renovada del popular N95 que, salvo pantalla tactil tiene de todo, incluso radio y televisión) y el XPressMusic 5610, que ofrece, casi, lo que tiene el iPhone con un diseño atractivo y un precio que rondará los 300 euros.

Motorola es otro de los grandes que busca el sitio perdido en la gama alta de los móviles. Y su apuesta, clara es Android. Samsung también nos dará, seguro, agradables sorpresas. Como HTC, líder en Windows Mobile, que ha sorprendido con el primer dispositivo basado en Android. Y es que aquí , en el mercado del móvil, nadie se casa para toda la vida.

Y los fábricantes de hardware, ¿qué?

Queda por ver la respuesta de los fabricantes tradicionales de PCs, tipo Dell, Lenovo o Asus, si de verdad va en serio. Por ahora han sacado modelos pero no han entrado en serio en el circuito de distribución europeo ni americano. Pero seguro que no pierden la oportunidad de expandir su línea de negocio.

Y  finalmente quedan los clónicos. Seguro que los chinos están al quite de este boom y proveerán a operadoras y fabricantes serie B de terminales potentes, bonitos y sobre todo baratos que vayan en esta línea. Atentos a la capacidad de copia. Si con el iPhone no ha ido bien, con los Windows Mobile han conseguido una notable cuota de mercado.

En fin, de aquí a navidades seguro que surgen otros muchos smartphones competitivos que abrirán el espectro al consumidor. Otras claves para el éxito o el fracaso de las futuras propuestas que no hemos hablado en este artículo (nos lo reservamos para otro) son el apoyo de las operadoras y el software de terceras partes, clave para multiplicar las posibilidades de estos dispositivos. El iPhone ha resuelto ambos capítulos perfectamente y el primer Android, el T Mobile G1, sigue los mismos pasos. De hecho, han conseguido reproducir el fenómeno «lista de espera» de objeto muy deseado, el sueño de todo fabricante aunque a corto plazo genere problemas de logística.