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Análisis

Probamos la tecnología XGP

En MuyComputer hemos tenido una toma de contacto con la relativamente nueva tecnología XGP (eXternal Graphics Platform) de ATI sobre un portátil Fujitsu-Siemens Amilo Sa 3650 equipado con esta propuesta de la compañía norteamericana para solucionar el problema del rendimiento gráfico (y multimedia) en equipos portátiles.

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En MuyComputer hemos tenido la oportunidad de realizar una toma de contacto con la relativamente nueva tecnología XGP (eXternal Graphics Platform) de ATI sobre un portátil Fujitsu-Siemens Amilo Sa 3650 equipado con esta propuesta de la compañía norteamericana para solucionar el problema del rendimiento gráfico (y multimedia) en equipos portátiles.

 

Tradicionalmente, la integración de unos gráficos solventes estaba limitada a portátiles a partir de 15 pulgadas, relegando a los modelos más pequeños a un segundo plano mediante el uso de gráficos integrados con un rendimiento modesto.

 

Con la introducción de la plataforma Puma hace unos meses, ya se anunció XGP, pero sin que hubiera un respaldo en forma de productos tangibles. De ahí que se trate de una relativamente nueva tecnología, pues a pesar de que sus especificaciones ya estaban desveladas desde hace tiempo, es sólo ahora cuando hay un producto real que se puede probar para ver si XGP es en la práctica tan revolucionario como sobre el papel.

 

Las pruebas

 

En un próximo artículo profundizaremos en los detalles técnicos de bajo nivel de esta tecnología. De momento baste decir antes de pasar a los resultados, que se trata esencialmente de llevar el conector PCI-Express «fuera» de la placa base para poder conectar dispositivos externos también PCI-E. En la teoría es sencillo, pero en la práctica, diseñar un conector robusto, rápido, económico, fiable y seguro que sea apto para integrar todas las conexiones y líneas PCI-E no es tarea sencilla.

 

 

 

 

 

Partiendo desde cero, AMD y Japan Aviation Electronics Industry Limited (JAE) trabajaron durante meses para desarrollar un cable adecuado. En primera instancia preparado para hasta 8 líneas PCI-E, aunque también habrá cables preparados para 16 líneas. XGP permite la conexión en caliente, así como la desconexión mediante el administrador de dispositivos externos conectados. De no hacerlo así, el riesgo de conseguir un pantallazo azul es elevado.

 

Una vez solucionado el tema del cable, diseñar una caja externa donde albergar una tarjeta gráfica con un buen rendimiento no es un problema, pues la alimentación y la disipación se gestionan fuera del portátil, de modo que existe un margen bastante amplio para dimensionar la disipación y el consumo sin afectar al propio ordenador. Además, existe margen también para integrar conectores como HDMI, DVI, e incluso USB a modo de hub.

 

En el futuro está previsto incluso ampliar las posibilidades de esta caja externa de gráficos mediante la integración de sistemas de almacenamiento como discos duros y configuraciones CrossFire. De hecho, se puede pensar en innumerables aplicaciones, no sólo para portátiles, sino para equipos de sobremesa como un método sencillo para extender las posibilidades gráficas y multimedia sin tener que modificar la configuración de base, ni sacrificar el factor de forma.

 

Eso sí, antes se debería pensar en unificar el tema de la alimentación de la caja externa GraphicBooster (así es como la denomina Fujitsu Siemens), pues de momento se soluciona mediante un transformador de corriente idéntico al del portátil, lo cual es algo aparatoso. Además, no fuimos capaces de configurar audio a través de la conexión HDMI del GraphicBooster, ni encontramos que los controladores instalasen ningún códec de audio, aunque no debería ser problemático solucionarlo en versiones finales de los controladores Catalyst.

 

 

 

Por otro lado, las especificaciones hablan de que sólo conectando los gráficos externos y sin usar monitores adicionales se puede acelerar el rendimiento en la pantalla del propio portátil. Sin embargo, en nuestras pruebas sólo pudimos acelerar el rendimiento sobre pantallas externas. De nuevo, no debería ser problemático habilitar configuraciones CrossFire, algo que en las pruebas tampoco pudimos realizar.


En cualquier caso, los números hablan por sí solos. La mejora del rendimiento usando la tecnología XGP es excepcional. Y permite usar un portátil de sólo 13,3 pulgadas  y una buena portabilidad como máquina de juegos solvente y como centro multimedia al habilitar una salida HDMI, otra DVI y configuraciones avanzadas multimonitor. De hecho, en las pruebas también lanzamos sendos clips multimedia de alta definición para verlos simultáneamente en la pantalla del portátil y en otra externa conectada mediante HDMI.

 

 

 

Configuración Far Cry 2

Demo «Ranch Small», 1.280 x 768, DirectX 10, FSAA 4x, VSync No, Calidad Óptima, Vegetación High, Shading High, Terrain High, Geometría High, Post FX High, Texturas High, Shadow High, Ambiente High, HDR Sí, Bloom Sí, Fuego High, Physics High, RealTrees High

En resumidas cuentas, estamos ante una tecnología que bien comunicada y desarrollada puede abrir las puertas a interesantes soluciones que permitan crear un ecosistema lúdico, multimedia y productivo alrededor de los ordenadores portátiles y los sobremesa mediante el uso de soluciones externas «de quita y pon».

 

El precio del modelo analizado con gráficos HD 3870 es de unos 300 euros. Una cifra algo elevada si se compara con el precio de una tarjeta equivalente para equipos de sobremesa, pero sensata si se piensa que es el primer modelo que se lanza, y más aún si se tiene en cuenta que el precio del conjunto portátil-GraphicBooster estará en torno a los 1.200 euros 1.400 euros dependiendo de la configuración. Además, integra un práctico concentrador USB y permite tener un portátil realmente portátil, con unos gráficos propios de equipos más pesados.

 

Me encargo de traer innovación y nuevo negocio al grupo TPNET. Además colaboro en varios de nuestros sitios como MC y MCPRO.

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