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Cambios en la cúpula de Sony

La reestructuración en la directiva de Sony es un hecho. El CEO de la compañía, Howard Stringer, ha pasado a ser presidente mientras que Ryoji Chubachi, el anterior ocupante del cargo, cederá su puesto para pasar a ocupar otro cargo, responsable en la división de calidad y seguridad de productos. Sony también hará modificaciones en el área de electrónica y juegos para hacer más competitiva la empresa en este sector.

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La reestructuración en la directiva de Sony es un hecho. El CEO de la compañía Howard Stringer ha pasado a ser presidente mientras que Ryoji Chubachi el anterior ocupante del cargo que queda con un puesto menor, viceresponsable en la división de calidad y seguiradad de productos. Sony también hará modificaciones en el área de electrónica y juegos para hacer más competitiva la empresa en este sector.

 

Howard Stringer se ha hecho con el puesto de presidente de Sony quitando del medio al antiguo presidente Ryoji Chubachi que se ha quedado con la vacante de viceresponsable de la divisón de calidad y seguridad en los productos, un puesto donde deberá tomar muchas más decisiones pero en el que seguramente gane bastante menos, según informa The New York Times.

 

 

Este cambio es parte del plan de reestructuración que comenzó con el despido de más de 8.000 empleados. Además, la compañía pretende realizar otras modificaciones dentro de la división de videojuegos y electrónica que haga más competitiva la empresa que no está pasando por su mejor momento con esto de la crisis económica.

 

«Este reorganización esta diseñada para transformar Sony en una empresa más innovadora, integrada y global«, asegura el recién nombrado presidente Stringer. «Los cambios harán que todas las partes de Sony trabajen conjuntamente«, anuncia Stringer que por sus palabras pretende dar un gran cambio a la compañía que lleva unos meses de capa caída.

 

A los despidos anunciados, Sony advertió que eliminará 8.000 empleos más en todo el mundo y cerrará 57 fábricas. Unas rápidas decisiones para un problema económico que puede hacer perder a Sony más de 2,7 billones de dólares en el primer trimestre del año.

 

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