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Análisis

Placa base MSI P55 GD-65

MSI nos presenta una propuesta orientada a usuarios exigentes basada en el chipset Intel P55 y dotada de tecnología de última generación. La placa ofrece una construcción sólida y componentes de alta calidad además de incorporar funciones exclusivas que permitirar obtener el máximo rendimiento de nuestor ordenador de una forma sencilla, práctica y segura, con sólo pulsara un botón. Analizamos la nueva MSI P55 GD-65, una excelente opción sobre la que montar un PC de alta gama.

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MSI nos presenta una propuesta orientada a usuarios exigentes basada en el chipset Intel P55 y dotada de tecnología de última generación. La placa ofrece una construcción sólida y componentes de alta calidad además de incorporar funciones exclusivas que permite obtener el máximo rendimiento de nuestro ordenador de una forma sencilla, práctica y segura, con sólo pulsara un botón. Analizamos la nueva MSI P55-GD65, una excelente opción sobre la que montar un PC de alta gama.

En el laboratorio ya hemos hablado en muchas ocasiones de la importancia que tiene la elección de una placa base en el rendimiento global del equipo. Los procesadores de última hornada demandan una alimentación estable en todo momento y configuraciones complejas con varias tarjetas gráficas necesitan una base consistente y fiable. Esta MSI P55 GD-65 está especialmente diseñada para trabajar con procesadores Intel Core i5/Intel Core i7 sobre el socket LGA-1156.

MSI se suma a la reciente tendencia de acercar el overclocking a todos los usuarios que ya hemos visto en otros fabricantes, poniendo a disposición del gran público una forma sencilla de incrementar el potencial del equipo mantieniendo al mismo tiempo el control total sobre parámetros que exigen los más expertos.

El fabricante taiwanés presenta la placa acompañada de puentes para montajes Crossfire y SLI, cables IDE y Floppy, 4 cables SATA, un adaptador de Molex a 2 SATA, un DVD con drivers, programas y documentación adicional.

Un primer vistazo revela un diseño atractivo, con el PCB en sobrio color negro, slots en azul eléctrico y disipadores plateados. La distribución es correcta, permitiendo cualquier tipo de instalación sin demasiados problemas. La disipación del chipset corre a cargo del sistema SuperPipe (funciona con un heatpipe de 8 mm, un 60% más delgado que otros modelos) que se encarga de sacar el calor del componente de manera efectiva y silenciosa.

Junto a los 4 slots de memoria DDR3 (soporta hasta 2.133 MHz de frecuencia) encontraremos el V-Check Point, un aspecto muy interesante para los usuarios con conocimientos avanzados y que quieran tener un control real sobre los voltajes más allá de la información que les brinda el software.

Entre los slots de expansión encontramos 2 PCIe 16X (16x o 8x-8x), 2 puertos PCIe 1x, un puerto PCIe 4x y 2 Puertos PCI 32bits. Su excelente ubicación nos permitirá disfrutar de montajes SLI/CF con tarjetas dual slot y mantener un puerto PCIe 4x, un puerto PCi y uno PCIe 1x.

Una ausencia que acusarán los más expertos es la de un botón Clear CMOS, aunque se mantiene el clásico jumper su posición lo hace prácticamente inservible en configuraciones con dos tarjetas. Una extraña decisión que esperamos ver corregida en futuros modelos.

En la parte baja de la placa encontraremos el botón para activar el chip OC GENIE, que lee las configuraciones de CPU y memoria y establece una configuración óptima de forma automática. Además también es posible modificar los parámetros por defecto pulsando los otros dos botones (+) y (-) que encontraremos a la derecha. Justo a su lado econtraremos un botón para resetear fácilmente en caso de problemas.

El panel posterior ofrece puertos PS/2 para ratón y teclado, salida óptica de audio, salida SP/DIF, Firewire 400 (VIA VT 6315N), 7 puertos USB 2.0, 2 puertos Gigabit Ethernet (Realtek RTL 8111DL), eSATA/USB (JMicron JMB363) y el Audio HD 7.1 (Realtek ALC889).

Hemos montado la placa en el laboratorio con distintas configuraciones (incluyendo sistemas SLI con tarjetas de doble slot) presentado un rendimiento fantástico en todos los casos. Los ajustes del OC GENIE automáticos son naturalmente precavidos (deja el bus en 197 MHz y el voltaje a 1.4v) pero podemos exprimir un poco más su potencial sin riesgos con sólo pulsar un botón. También es recomendable adquirir un buen kit de memoria para aprovechar el soporte hasta 2.133 MHz en doble canal.

La MSI P55-GD65 es una placa de calidad que permitirá sacar el máximo rendimiento a los componentes de nuestro ordenador. Además gracias a las nuevas tecnologías y software específico incorporado brinda la posibilidad de hacer overcloking hasta a los usuarios más noveles, amortizando la inversión con un rendimiento óptimo.

Me encargo de traer innovación y nuevo negocio al grupo TPNET. Además colaboro en varios de nuestros sitios como MC y MCPRO.

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