Conecta con nosotros

Análisis

WD My Passport Essential USB 3.0

Publicado

el

Los discos duros externos vuelven a cobrar interés con la creciente popularización del estándar de conexión USB 3.0, y lo demuestra esta edición especial de uno de los productos de Western Digital en este segmento. El WD My Passport Essential ya dispone de conectividad USB 3.0, lo que permite que este producto gane muchos enteros en sus tasas de transferencia.

En todo lo demás el producto sigue manteniendo las mismas funciones que su antecesor, que solo contaba con conectividad USB 2.0, y aunque solo exista esa diferencia entre uno y otro, los poseedores de PCs y portátiles con puertos USB 3.0 notarán la mejora.

Diseño e instalación

En los últimos meses las unidades My Passport han sufrido cierta transformación y han visto reducido claramente su tamaño -ya analizamos en el pasado la edición Elite-, que ahora (15x110x83 mm, 140 g de peso) ocupa poco más que una cajetilla de tabaco.

La carcasa plástica en negro -hay cuatro colores más- resulta muy elegante, y sigue la estética de otros productos de Western Digital en este segmento, pero en este caso encontramos tan solo dos pequeños aspectos diferenciales: el puerto USB 3.0, y el LED que indica la actividad de la unidad.

En realidad el puerto USB no se diferencia del puerto anterior,salvo por el hecho de que en este caso tenemos un cable USB con la pequeña banda azul en el conector que identifica ese salto del estándar. La capacidad de la unidad es de 500 Gbytes, algo destacable para una solución de estas dimensiones.

En cuanto a la instalación, no hay mucho que comentar: como otras unidades externas, bastará con conectarla a nuestro ordenador para que el sistema operativo la reconozca y la ponga a nuestra disposición. Lo que sí podremos hacer es instalar además el software WD SmartWare que está presente en otras soluciones de Western Digital y que permite realizar backups incrementales tanto en sistemas Windows como en sistemas Mac OS X.

Rendimiento

La clave de la unidad es sin duda el uso del estándar USB 3.0. Este estándar es compatible hacia atrás con el estándar USB 2.0, de modo que todos los usuarios de ordenadores con puertos USB 2.0 también podrán utilizar perfectamente esta unidad, aunque obviamente no lograrán aprovechar su ventaja fundamental, pero es una solución que nos garantiza que en el futuro podremos sacarle todo el partido con futuros PCs y portátiles que sí integren la tecnología USB 3.0.

Ficha técnica

En nuestras pruebas realizamos tests con HD Tach y obtuvimos resultados esperables para el caso de USB 2.0, con tasas de lectura que se situaron de media en los 38,9 Mbytes por segundo. Al conectarlo a un equipo con USB 3.0, esa tasa de transferencia casi se duplicó, pasando a ser de 72,3 Mbytes por segundo. En escritura obtuvimos un comportamiento análogo, aunque con peores tasas: 58,9 MBps en USB 3.0 y 28,08 en USB 2.0.

Esas cifras certifican la validez de las soluciones USB 3.0, pero también dejan claro que hoy por hoy el WD My Passport Essential no es ni mucho menos la unidad externa más veloz del mercado. Incluso con USB 3.0, un estándar que tiene picos teóricos 10 veces superiores a los de USB 2.0, las tasas de lectura y escritura se comportaban tan solo correctamente.

Uno de los cuellos de botella para este rendimiento probablemente se encuentre en la propia unidad de disco que encierra esa carcasa negra, y que al ser de ese reducido tamaño también tiene sus limitaciones: una menor velocidad de rotación (5.400 RPM) influye de forma crítica en el rendimiento de la solución, y el puerto USB 3.0 da muchas más alegrías en unidades externas con discos de 3,5 pulgadas, con mayor velocidad de rotación y también mejor mecánica.

Conclusiones

La introducción del puerto USB 3.0 en unidades USB externas es un gran aliciente para el mercado y para los usuarios, que podrán mejorar de forma clara el rendimiento de sus transferencias en toda la gama de dispositivos actuales. El WD My Passport Essential 500 Gbytes con USB 3.0 es un ejemplo de ello, aunque el rendimiento tanto en puertos USB 3.0 como en USB 2.0 es más bien discreto.

El precio de 99 euros no es tampoco especialmente atractivo salvo por dos apartados: el pequeño tamaño de la unidad, que la hace extremadamente cómoda de llevar a cualquier parte -incluso en el bolsillo- y, por supuesto, la presencia del puerto USB 3.0, que garantiza que al menos sacaremos el máximo partido de su capacidad en los equipos actuales y futuros con soporte para esta interfaz.

Lo más leído