Un ciberdelincuente enfrenta 334 años de cárcel en Turquía

Turquía no es precisamente el mejor ejemplo cuando tenemos que hablar del respeto hacia los derechos humanos, aunque el asunto se está yendo últimamente de nuevo al camino de lo ridículo con las condenas que se están imponiendo en el país, ya que en el último caso un ciberdelincuente pasará 334 años en prisión.

Onur Kopçak es el nombre del reo, un joven de 26 años que gracias al phishing consiguió datos de varias decenas de tarjetas de crédito y fue condenado inicialmente por ello a casi 200 años de cárcel, pero la celebración de un nuevo juicio en le que ha sido encontrado culpable de vender datos bancarios de 11 tarjetas de crédito ha engordado la pena en 135 años más, lo que sumada a la anterior nos deja ese total de 334 años.

Desde luego no voy a entrar a valorar si la misma está justificada o no en base a la ley penal turca, ya que no la conozco y sería hablar por hablar, de hecho tampoco vamos a entrar a comparar dicha condena con la que se habría impuesto en España, pero haciendo una valoración simple con un poco de sentido común vemos que la misma es totalmente desmedida.

El motivo es muy simple, y es que salvo que tenga la suerte de acortar la pena por alguna vía de reducción de condena ese joven de 26 años pasará toda su vida en la cárcel por robar datos de varias tarjetas de crédito, esto es, por una estafa que tampoco ha teniendo una gran entidad.

Sin duda una condena récord que supera todo lo que habíamos visto hasta ahora en casos vinculados a delitos informáticos.

Más información: Softpedia.