Google abre Android en Rusia ¡Él no quería!

La distribución de Android en Rusia va a sufrir cambios fundamentales tras el acuerdo alcanzado por Google con el regulador de competencia para abrir el sistema a apps y servicios de terceros, en especial al gigante de las búsquedas ruso, Yandex.

El pasado año, un tribunal de arbitraje confirmó el fallo del Servicio Federal Antimonopolio de Rusia (FAS), donde encontraba a Google responsable de abuso de posición de dominio de mercado, tras una denuncia de Yandex. Android hanría estado obligando a los fabricantes de smartphones a preinstalar aplicaciones y servicios de la compañía e impedir la instalación de las alternativas de terceros.

Ahora, Google ha anunciado un acuerdo comercial con Yandex (supervisado por el regulador), por el que no «exigirá la instalación exclusiva de sus aplicaciones en los dispositivos basados en Android en Rusia”.

En un plazo no determinado, el FAS dice que Google creará una «ventana de elección» en su navegador Chrome, que ofrecerá a los usuarios de Android existentes en Rusia la opción de seleccionar un motor de búsqueda predeterminado diferente al propio de Google.

La función se desplegará mediante una actualización de software vía OTA y también incluirá un nuevo widget para el servicio de búsqueda. Cuando Chrome se ponga en marcha por primera vez, los usuarios verán una opción para elegir Yandex o Google Search.

Otros proveedores de motores de búsqueda (como Bing o Yahoo!) también estarán disponibles, aunque tendrán que suscribir el acuerdo comercial con Google, recordemos supervisado por el regulador ruso de acuerdo con la sentencia condenatoria.

Desde Yandex se ha valorado positivamente esta solución que, «restaura los elementos necesarios para asegurar un ecosistema más dinámico y competitivo, solo posible si esas plataformas son lo suficientemente abiertas para fomentar la competencia y permitir el acceso a los desarrolladores de terceras compañías«.

Cambios importantes de Android en Rusia que podría extenderse a otras regiones porque las demandas anticompetitivas contra Google están siendo investigadas por otros reguladores como el de la Unión Europea.