A Fondo

MWC: Popularización del smartphone

Publicado

22 febrero, 2010

por

El segmento de la movilidad ha crecido de un modo sostenido durante los últimos años y ha ido “quemando” etapas a un ritmo acelerado como pocas veces se ha visto. Empresas como Blackberry están ya en los puestos de cabeza de las que más rápidamente han crecido en el sector IT.

Texto y fotos Manuel Arenas

Y no es casualidad que Blackberry sea una empresa de movilidad. Qualcomm, en pocos años ha entrado de lleno en el sector de los semiconductores, “atravesándolo” y moviéndose hacia otras áreas de negocio con un ímpetu propio de compañías mucho más afianzadas en este sector. LG o Samsung han conseguido que sus divisiones móviles crezcan por encima de otras tradicionalmente más fructíferas. Google, que ha encontrado en la movilidad el modelo de negocio perfecto para poner a funcionar las tres patas que Google considera esenciales para la movilidad: procesamiento, conectividad y la nube. Nokia, nacida para y por los móviles (aunque ahora tiene que encontrar la forma de trasladar ese éxito a los servicios). Y de Apple, qué decir con el éxito sin precedentes en este negocio de su iPhone.

En Barcelona, se vieron más smartphones que terminales convencionales. Y es que aunque suponen un 25% de las ventas su crecimiento es exponencial.

Ejemplos y más ejemplos de éxitos, que en esta edición del MWC han conseguido quemar una importante etapa: la de la plebeyización. Tradicionalmente los terminales podían ser de gama alta, baja, media o SmartPhone. Los PDAs convergieron con la telefonía primero. Y con los datos después. Las tarifas de datos de las operadoras se han ido “aplanando” en precio y aumentando en velocidad. Y ahora, llega el momento de que los Smartphones lleguen a todas las audiencias. Podrán ser de gama baja, media o alta, pero en todos los casos Smartphones. O casi todos. O si no son realmente teléfonos inteligentes, tendrán todas las funcionalidades necesarias para acceder a servicios y contenidos “ricos”, a redes sociales o aplicaciones avanzadas. Puede que no sea el usuario quien decida qué aplicaciones serán, sino el operador o el fabricante del terminal, pero serán aplicaciones avanzadas en todo caso.

La importancia de este fenómeno de plebeyización es enorme: por un lado abre las puertas a servicios de marketing avanzados que favorecen la inyección de dinero en las campañas específicas para movilidad, con las ventajas que ello conlleva de inmediatez, selección de “target” y localización geográfica.

Dicen las malas lenguas que Google repartió 2.000 Nexus One en Barcelona entre la comunidad de desarrolladores.

Por otro, permite a los desarrolladores de aplicaciones que sus creaciones lleguen a una audiencia sustancialmente mayor, con mejores oportunidades de negocio. Y al mismo tiempo, también favorece que los servicios gestionados tengan un mayor número de clientes potenciales. Servicios en la nube, o en servidores corporativos. La época actual es clave en el desarrollo de la movilidad precisamente porque es ahora cuando todas las piezas (conectividad, dispositivos, servicios online, aplicaciones y sistemas operativos, proveedores de contenidos y sobre todo los usuarios) están sobre la mesa a la espera de que encajen.

En esta edición de MWC, este mensaje de plebeyización o democratización del Smartphone ha sido constante. Desde Samsung, hasta HTC, Sony Ericsson, Acer o cualquier otro “jugador” en el segmento de la movilidad, en los catálogos de productos para este año habrá una diversificación de gamas de Smartphones, con modelos a partir de 150 € en algunos casos. No es de esperar que se regalen… aún. La parte interesante del negocio será pronto la del marketing y servicios y aplicaciones. Los operadores antes ofrecían terminales gratis a cambio del uso de la red, pero el siguiente paso es que los proveedores de servicios y contenidos ofrezcan terminales subvencionados a cambio de la fidelización a servicios y aplicaciones.

Las piezas que más complicado parece encajar son las correspondientes a las operadoras. Las recientes declaraciones de César Alierta apuntando hacia una posible fórmula en la que compañías como Google tendrían que pagar por el uso de sus redes de comunicaciones no son nada tranquilizadoras. Por otro lado, en la Keynote de Eric Schmidt, CEO de Google, también quedó patente la tensa situación que empieza a perfilarse, donde las operadoras y las empresas proveedoras de contenidos, lejos de cooperar, compiten por una parte mayor de la tarta de la movilidad.

Milestone, la propuesta inteligente de Motorola.

En el tiempo de Q&A de la Keynote de apertura de MWC, algunos periodistas llegaron a plantear acusaciones, más que cuestiones, apuntando a la intención de Google de convertir a las operadoras en meros “intermediarios tontos”, dejando toda la inteligencia de las redes móviles en manos de compañías como Google. Sea como fuere, las piezas del rompecabezas están ahí, aunque algunas costará más encajarlas que otras.

La filosofía de Google respecto a movilidad está definida, y en ella la parte más importante no es el terminal en sí mismo, sino la inteligencia de “la nube”. El Smartphone tiene su papel, desde luego, pero es esencialmente reemplazable en tanto en cuanto todo está online, replicado en servidores remotos. Posiblemente el mayor logro de Android ha sido el de acelerar el proceso de plebeyización, con una adopción creciente de este SO por parte de la mayoría de los fabricantes de terminales, con la excepción de Nokia. A Google le interesa más aún que obtener dinero directamente a partir de Android, que de hecho es parte de la Open Handset Alliance más que un proyecto exclusivo de Google.

De todos modos, Eric Schmidt fue “generoso” con las operadoras en el momento de explicar que el desarrollo de sistemas de gestión financiera a través del móvil era un aspecto que correspondía a las operadoras y no a Google. El panorama es optimista, aunque con un ojo puesto en posibles desarreglos. Las piezas están sobre la mesa, es cierto, pero hay aún asignaturas pendientes que resolver.