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Qué es la segunda generación de ultrabooks y por qué se caracteriza

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Los Ultrabooks son equipos ligeros que ofrecen un gran equilibrio entre portabilidad y rendimiento. De hecho, la popularidad de este tipo de equipos es tanta que Intel ya ha lanzado la segunda generación de Ultrabooks con notables mejoras en rendimiento, autonomía y conectividad. ¿Sabrías decirnos cuales? Veámoslo en detalle.

Esta Segunda Generación de ultrabooks aparece conjuntamente con el lanzamiento de los nuevos procesadores Intel Core de tercera generación, que hacen uso de la microarquitectura Ivy Bridge y que aportan varias ventajas notables: más rendimiento, más eficiencia energética y, sobre todo, mucho mejor rendimiento gráfico gracias a las GPUs integradas Intel HD 4000, que entre otras cosas ofrecen soporte para DirectX 11.

Así, nos encontraríamos con unos ultrabooks que estarían definidos por las siguientes características:

  • Procesadores Intel Core de tercera generación (microarquitectura Ivy Bridge): Además de ser más potentes y eficientes a nivel energético, integran las nuevas GPUs Intel HD 4000 con el citado soporte DX11. Se siguen usando procesadores CULV con un TDP de 17 W.
  • Espesor
    • 18 mm para modelos con pantalla de 13,3 pulgadas.
    • 21 mm para modelos con pantalla mayores o iguales que 14 pulgadas.
    • 23 mm para modelos híbridos (Tablet PCs)
  • Autonomía de al menos 5 horas.
  • Sistema de almacenamiento con una unidad SSD como medio principal (se aceptan soluciones híbridas que combinan SSD y disco duro tradicional). Al menos 80 Mbytes por segundo de tasa de transferencia y 16 Gbytes de capacidad para la unidad SSD como mínimo.
  • Tiempo de recuperación tras hibernación de 7 segundos como máximo.
  • Conectividad USB 3.0: Al menos un puerto de estas características, pero hay que tener en cuenta que el chipset UM77 que Intel ha diseñado para esta segunda generación soporta hasta cuatro puertos USB 3.0.

A estas características se le pueden sumar otras interesantes y complementarias, como puertos adicionales. Los ejemplos destacables serían HDMI o MiniHDMI, DisplayPort o Mini DisplayPort, pero sobre todo Thunderbolt, un estándar creado precisamente por Intel. La presencia de una webcam frontal para videoconferencias o un lector de tarjetas multiformato son también posibles aspectos a cubrir por los fabricantes, que tienen además otra serie de posibilidades a su alcance para dar más valor a unos diseños que, eso sí, ofrecerán siempre unas dimensiones y un peso muy reducidos.

Otra de las tendencias de interés en esta segunda generación de ultrabooks es la presencia de pantallas de alta resolución que permitirán exprimir al máximo los tamaños tradicionales de estos modelos, que normalmente se mueven en tamaños de 13,3 o 14 pulgadas. El diseño de referencia de Intel, por ejemplo, hace uso de una pantalla de 13,3 pulgadas con una resolución de 1.600 x 900 píxeles, y es posible que esas resoluciones puedan crecer a medio plazo, dando a los usuarios más espacio y más definición para trabajar en sus escritorios.

A este desarrollo también contribuirán de forma esencial las nuevas unidades SSD, con controladoras mucho más potentes que ofrecen tasas de transferencia de lectura y escritura que rondan los 400 Mbytes por segundo en muchos modelos. El abaratamiento de estas unidades y la adopción de formatos mSATA (en lugar de los modelos tradicionales de 2,5 pulgadas) favorece la adopción de unas soluciones perfectas en formato, precio y prestaciones, y que no hacen más que garantizar la potencia de estos ultrabooks de Segunda Generación.

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