El mercado de las consolas se desploma en Japón

Famitsu, medio de referencia sobre videojuegos en Japón, publica la impresionante gráfica que acompaña a estas líneas. Las ventas de videoconsolas en Japón llevan ocho años en caída libre y ya se sitúan en cifras de 1990 (como referencia, SNES se presentó un año más tarde), en gran parte debido al éxito de los videojuegos para plataformas móviles.

Desde aquella revolución llamada Wii (que probablemente salvó a Nintendo de la bancarrota) los fabricantes de consolas (tanto portátiles como sobremesa) han visto como las ventas se desplomaban año tras año. Revisando los números de 2014, Nintendo 3DS aparece la primera de la lista con 3,1 millones de únidades, seguida de PS Vita con 1,1 millones (en Japón los usuarios siempre han preferido las portátiles).

En lo relativo a sobremesa domina PlayStation 4 con 925.570 unidades, seguida de Wii U con 604.856 consolas, PlayStation 3 con 450.034 y  Xbox One con solo 45.958 máquinas vendidas. En cuanto a juegos, ocho de los diez más vendidos son de factura japonesa y para 3DS, una muestra más de las peculiaridades de un mercado diferente para casi todo, incluyendo los videojuegos. En cuanto a PC, en Japón siempre ha sido un mercado marginal en lo relativo a ocio electrónico.

¿Qué está ocurriendo? Los analistas explican el fracaso del hardware dedicado con el éxito de las plataformas móviles, que ya cuentan con potencia más que suficiente para emular la experiencia de las portátiles y un catálogo de juegos que no para de crecer, incluyendo títulos nicho especialmente orientados al público japonés. ¿Pensáis que puede pasar lo mismo en otros países? ¿Acabarán los móviles y tablets con las consolas? ¿Cambiaremos hardware por servicios a la hora de jugar?

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