Wolder Wiam #71, análisis

Wolder presentaba hace unas semanas su nueva gama de smartphones recogidos bajo el nombre de Wiam. En MuyComputer hemos tenido la oportunidad de probar el Wiam #71, un terminal sencillo, ligero y eficiente por 199€.

Desde hace unos años, la oferta de smartphones que rondan los 200 euros se ha multiplicado y, mientras que los usuarios tienen mucho y muy bueno donde elegir, los fabricantes cada vez lo tienen más complicado para destacar. Wolder lo intenta con una propuesta equilibrada y que aporta valor añadido sobre lo habitual en esta gama en forma de un cuidado diseño y el sensor de huellas integrado.

Características técnicas

• Dimensiones: 146 x 71.8 x 7.6 mm.
• Peso: 136 gr.
• Pantalla: 5’’ HD IPS OGS (1280×720 px).
• Procesador: Quad Core 64 bits. 1,3 GHz MT6735.
• 8 Gbytes de memoria interna. 1 Gbyte de RAM.
• Batería de 2.400 mAh.
• Cámara trasera: 13 Mpx + Flash. Cámara delantera: 8 Mpx + Flash.
• Android 5.1.
• Precio 199 euros.

Uno de los puntos más fuertes de este dispositivo es el diseño. Un marco de metal hace de conexión entre dos cristales, la pantalla y la parte trasera. Se trata de un diseño muy sofisticado pero que tiende a ensuciarse fácilmente , ya que la marca de los dedos se queda reflejada con mucha facilidad. Aun así, deshacerse del plástico en un terminal en este rango de precios es algo que no se ve con facilidad, por lo que ya es un terminal a tener en cuenta.

En cuanto a las dimensiones y el peso, como se puede apreciar en el apartado de características están muy comedidas por lo que se convierte en un terminal muy cómodo de llevar y manejar. Los tres botones clásicos de Android se encuentran fuera de la pantalla y, en concreto, el botón inicial es físico al estilo de los Samsung Galaxy. Además, este botón incluye sensor de huellas.

Cada parte del smartphone está reservada para una acción. En la parte inferior se encuentra la entrada microUSB, en la parte izquierda la ranura para 2 MicroSIM y 1 MicroSD, en la parte superior la conexión mini jack para auriculares y en la parte de la derecha los botones de subir o bajar el volumen y el de apagar/encender.

El panel de 5 pulgadas de diagonal ofrece una resolución nativa de 1.280 x 720 píxeles, ofreciendo una densidad de 294 puntos por pulgada. La firma ha incorporado la tecnología Miravision para mejorar la calidad visualizando imágenes pero no hace milagros y las diferencias con terminales fullHD es fácil de detectar. A su favor, la mejora de rendimiento y de autonomía que supone tener que trabajar con menos píxeles.

En su interior este dispositivo cuenta con el procesador MediaTek MT6735 Quad Core de 64 bits que funciona rápido y fluido. Teníamos ciertos reparos por la escasa cantidad de RAM (un gigabyte) pero lo cierto es Android se entrega en una versión prácticamente limpia y el rendimiento en fantástico, sin rastros de lag incluso en escenarios multitarea. Con 8 Gbytes para almacenamiento de serie, la compra de una tarjeta microSD se antoja casi imprescindible.

Como suele ocurrir en estas gamas, la cámara es uno de los apartados donde se ha tenido que recortar: a pesar del sensor de 13 megapíxeles, el ruido aparece en cuanto no tenemos buena luz y Wolder Wiam 71 ofrece un rendimiento muy similar al de sus competidores: suficiente para uso normal y redes sociales, pero no es un terminal que te permita dejar la cámara en casa durante un viaje por ejemplo.

Conclusiones

Son tantas las opciones de adquirir un buen smartphone por menos de 200 euros que es complicado destacar de forma muy relevante. La marca española ha tratado de diferenciarse con el diseño y el sensor de huellas como comentábamos al principio que unido a unas prestaciones más que suficientes, hacen de este dispositivo un producto a tener en cuenta para regalar estas navidades.

El Wolder Wiam #71 ya se puede comprar en distribuidores autorizados por un precio recomendado de 199 euros. Nosotros hemos encontrado la mejor oferta en Amazon, donde se puede conseguir por 182. En definitiva, una excelente opción en gama de entrada que destaca por su equilibrio entre calidad, rendimiento y precio.