Chromebook, la china en el zapato de Microsoft

¿Pueden los Chromebooks de Google amenazar el reinado que Microsoft mantiene desde hace décadas en los equipos de escritorio? Hace unos meses, “No” sería la respuesta lógica y natural para esta pregunta. Los Chromebooks eran (y siguen siendo) equipos muy limitados, con una cuota de penetración en el mercado anecdótica.

Y sin embargo, algo podría estar cambiando. En primer lugar, si el concepto Chromebook fuese tan inocuo, ¿Por qué iba Microsoft a molestarse en realizar un anuncio para denostarlo? Tal vez porque tal y como recogen en “The Wall Street Journal” las ventas de Chromebooks estarían empezando a crecer en sectores estratégicos como la educación.

Tanto es así que en 2013, este tipo de equipos, habrían alcanzado la barrera del 19% en el sector educativo en Estados Unidos, en el segmento de dispositivos móviles, según un estudio realizado por la consultora Futuresource Consulting. Puede parecer poco, pero si tenemos en cuenta que en 2012 la cuota de mercado de Chromebooks en este mismo sector, apenas si rozaba el 1%, parece que los de Redmond empiezan a tener motivos para estar preocupados.

Y no sólo por el auge de los Chromebooks. El mismo estudio señala que la cuota de mercado de Windows en el sector educativo pasó del 47.5% de 2012, al 28% del último trimestre de 2013, un terreno en el que ya dominaban dispositivos como el iPad de Apple y en el que ahora encuentran un nuevo y duro rival.

Esta tendencia se repite tanto en eduación primaria y secundaria, como (y lo que resulta más preocupante) en la Universidad, espacio en el que por primera vez, la adopción del iPad se estanca. El principal motivo del auge del dispositivo de Google es que la mayoría de los estudiantes pueden trabajar perfectamente con un equipo que básicamente sirve para navegar por Internet.

Sobre todo porque a diferencia de las empresas, que sí pueden contar con aplicaciones legacy que no encuentran su réplica en la nube, la inmensa mayoría de las necesidades informáticas que puede tener el estudiante medio, puede resolverlas con aplicaciones cloud, sin que en la mayoría de los casos, desmerezcan a las de escritorio.

Además conviene destacar que frente al escepticismo inicial mostrado por la mayoría de los fabricantes, a día de hoy ya son pocas las marcas que no cuentan entre sus planes el desarrollo de Chromebooks. Además de los tradicionales Acer y Samsung (las primeras que se sumaron al carro), en los últimos meses hemos visto como Dell y HP han presentado sus equipos adaptados al sistema operativo de Google y esta desde luego, es una señal que Microsoft no puede ignorar.