MPEG-7 contra la piratería

El estándar de vídeo MPEG-7 no dispone de los datos de compresión clásicos de otros formatos como MPEG-1, MPEG-2 o MPEG-4, y en lugar se encarga de añadir una capa de metadatos que está muy orientada a luchar contra la piratería. La idea es la de añadir una serie de datos que se encontrarán ligados a las cadenas de información del vídeo y que por ejemplo variarán la firma digital de los ficheros en cuanto se realice una modificación en ellos, algo útil para identificar copias pirata.

Este tecnología crea la citada firma digital tras el uso de los algoritmos de compresión de audio y vídeo correspondientes, y eso hace que cada fichero multimedia tenga un «sello de autenticidad» que servirá tanto a los usuarios como a la industria para certificar que ese contenido es el auténtico.

Si alguien altera el vídeo -por ejemplo, añadiendo subtítulos, marcas de agua, o anuncios- se modificará la firma digital asociada a ese vídeo (o canción), y eso permitirá por ejemplo combatir la piratería identificando rápidamente ficheros que no son los originales.

El estándar es según NEC realmente eficiente, y la capa de metadatos («datos sobre los datos») que proporciona hacen que cualquier PC estándar pueda buscar en miles de horas de vídeo en pocos segundos.

Ahora queda saber si por ejemplo los grandes de Hollywood apuestan por el nuevo formato, que como decimos no aporta nuevos métodos de compresión, sino que se centra en ofrecer esa firma digital. Y por supuesto, también habrá que ver si esa capa de seguridad adicional es superada por los hackers y crackers que normalmente se esfuerzan en tratar de superar tales medidas de control.