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Sony exige a los medios la destrucción de datos robados de Sony Pictures

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Sony Pictures

El ciberataque a Sony Pictures sigue coleando y lo peor está por llegar porque el grupo que se atribuyó la intrusión, Guardians of Peace, han prometido «un regalo de Navidad para Sony» que se cree es la publicación de nuevos datos robados.

Quizá por ello, importantes medios estadounidenses que han informado del ciberataque y de sus consecuencias, han recibido una carta (.pdf) del abogado de Sony, David Boies, en la que pide la colaboración de los medios para «destruir la información robada» y recuerda la ilegalidad que supone la simple tenencia de la misma, dejando caer que la firma actuaría en consecuencia o lo que es lo mismo denunciando a los medios.

El ataque a la división que gestiona la distribución de producciones cinematográficas y televisivas de la compañía japonesa se las trae y ya se considera uno de los mayores de la historia a una corporación comercial. Sony ha reconocido que gran cantidad de datos fueron robados pero se ha negado a confirmar documentos específicos. Entre ellos se encontrarían datos y salarios de empleados, información financiera, planes de marketing, contratos con socios de negocios y un largo etc, incluyendo el filtrado de películas que aún no han llegado a la gran pantalla y un montonazo de cotilleos a base de correos electrónicos entre actores, directores y productores que parece ser es lo que más le preocupa a Sony.

Lo último ha sido el filtrado del guión de la próxima entrega de James Bond «Spectre», confirmado por la productora Eon Productions y que habría sido robado en el ataque a Sony Pictures. Spectre, de nuevo con Daniel Craig, la espectacular Belucci y Christoph Waltz como el malo de la película, es una de las grandes producciones a estrenar el próximo otoño y confirmación de la gravedad de un ataque que podría causar pérdidas millonarias a Sony.

Y lo peor es que la historia se repite tras el gran ataque de Anonymous en 2011 que dejó sin servicio a su plataforma de juegos PlayStation Network, comprometiendo información personal y cuentas que alcanzaron a 100 millones de usuarios. “Tareas de mantenimiento” se citaron en un primer momento e incluso la primera parte del ataque podría haber comenzado en el mes de febrero manteniéndose en secreto.

Mal asunto en mal momento cuando la multinacional se encuentra en pleno proceso de reestructuración, ha salido del mercado de ordenadores y está apoyándose en otros como su ecosistema de juegos, con muy buenas cifras para PS4 a la cabeza del mercado de consolas, y en otro grupo fuerte, hoy en la picota por temas de seguridad, el de la producción de pelis y series. Por cierto, ya se pide la cabeza de Amy Pascal, la presidenta de Sony Pictures y máximo responsable del desastre.

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