Bethesda habla sobre los problemas de rendimiento de Dishonored 2

Parece que por desgracia el esperado Dishonored 2 no ha venido acompañado de un buen trabajo de optimización, cosa que se ha dejado notar en los problemas de rendimiento que da el juego incluso con equipos que montan componentes de gama alta.

Un Core i7 6700K acompañado de una GTX 1080 tiene problemas para moverlo en resoluciones 2160p incluso reduciendo la calidad gráfica, pero lo peor es que con ese equipo hasta en 1440p hay caídas de fotogramas importantes, lo que pone de relieve, en definitiva, que se trata de un problema de desarrollo y que el juego está poco optimizado.

Ante la evidencia de los problemas de rendimiento Bethesda ha liberado un comunicado con una serie de recomendaciones, entre las que destacan lo siguiente:

• Si cumplimos los requisitos recomendados debemos jugar en alto y 1080p para conseguir 60 FPS.
• Mantener drivers y el sistema operativo actualizados.
• Reducir la calidad de las texturas, desactivar el TXAA y reducir el porcentaje en «Resolución Adaptativa».

Según hemos podido ver en diversas pruebas de rendimiento incluso reduciendo los ajustes de calidad gráfica y en soluciones como las GTX 970 no es posible mantener una experiencia de 60 FPS estables en 1080p, de hecho el rendimiento decae de forma brusca en zonas determinadas sólo con el hecho de mirar a un lado o a otro, lo que en definitiva evidencia un problema de nula optimización, y eso sólo se arregla con trabajo por parte de los desarrolladores.

Más información: WCCFTech.