Google Nest Wifi, análisis: estilo y conectividad en casa

De cuando en cuando el padre o madre de familia del siglo XXI se encuentra con el inquietante escenario que responde a la siguiente pregunta: “¿por qué no va la conexión?”, con miradas entre reproche y esperanza cónyuges ejecutivos, hijos adolescentes, los más pequeños de la casa e incluso las generaciones más veteranas, recurren al “experto” de la casa buscando una respuesta.

Por suerte cada vez más fabricantes son conscientes del drama que viven estas personas que por vanidad o por sorteo han sido designadas como los portadores de la valiosa llave de la conectividad familiar (y en ocasiones empresarial) y acuden al rescate con soluciones que, por suerte también, son cada vez más sencillas de implementar. E incluso han dejado de ser tremendamente antiestéticas.

Una de las principales razones de estas frustraciones de conectividad es la baja potencia y calidad que suelen exhibir los routers proporcionados por las compañías de telecomunicaciones que para mantener bajos los costes. En otras ocasiones el problema es simplemente la arquitectura. El que no llegue la señal Wi-Fi a toda la casa no significa necesariamente que dispongamos de un alojamiento señorial de varios cientos de metros cuadrados. A veces los obstáculos físicos y el material de los mismos da al traste con nuestras sesiones de Netflix en algunos de los rincones de nuestra casa.

Especificaciones Google Nest Wifi

• Procesador: CPU ARM 1.4 GHz 4 núcleos y  64-bit
• Memoria: 1 Gb RAM 4 Gb Flash (router) 768 MB RAM 512 MB Flash (punto de acceso)
• Antenas: 4×4 MIMO (5 GHz) 2×2 MIMO (2.4 GHz)
• Conectividad inalámbrica: Doble banda IEEE 802.11a/b/g/n/ac
• Conectividad: Dos puertos Gigabit
• Señal: Hasta 400 Mbps
• Cifrado: WPA2
• Dimensiones: 110 mm diámetro, 90,4 altura (router) 102,2 diámetro 87,2 altura  (punto de acceso)

Esta falta de cobertura ha hecho proliferar soluciones de todo tipo para cubrir estas deficiencias, desde simples extensores de Wi-Fi que conectados a un enchufe extienden la señal de nuestra red a los más avanzados router Mesh o de malla. Entre otras, la Google acaba de presentar en España su sistema Google Nest Wifi, un conjunto de dos dispositivos (router y punto de acceso) que disponen de la mencionada tecnología Mesh pero que añaden una estética atractiva, sencillez de configuración y uso y la integración (en el caso de los puntos de acceso) de funcionalidades de altavoz inteligente. Todo dentro del ecosistema Google Home.

Mayor cobertura

Según Google este nuevo modelo mejora en un 25% la cobertura del anterior Google Wifi con lo que es capaz de cubrir una superficie de 210 metros cuadrados en condiciones ideales. El conjunto router más punto de acceso en teoría es capaz de cubrir hasta 350 metros cuadrados y añadiendo puntos de acceso se pueden aumentar esta capacidad.

Hemos podido probar un conjunto de router y punto de acceso, un paquete que tiene un precio de 259 euros ya disponible en la Google Store y que incorpora un router que se ocupa de la conexión a Internet y de la puesta en marcha de la malla y de un punto de acceso que funciona también como altavoz inteligente Google Home. También puede adquirirse el router solamente por 159 o un punto de acceso adicional (sin el router no funcionalidad) por 139 euros. El punto de acceso también es compatible con el anterior Google WiFi.

Una vez abierta la caja podemos comprobar que los dispositivos tienen el mismo diseño vanguardista y agradable que otros dispositivos de la gama de hogar conectado para la que Google ha adoptado el nombre Nest de la compañía de dispositivos de hogar inteligente que adquirió en 2014. Por cierto, un packaging muy cuidado en el que se ha prestado atención incluso a los alambres que recogen los cables para que todo tenga un aspecto limpio y ordenado.

Tanto router como punto de acceso tienen un diseño prácticamente idéntico y a primera vista solamente les distingue el tamaño. Con un examen más de cerca aparecen algunos detalles como el led indicador del funcionamiento de la Wi-Fi en la parte frontal del Router o las minúsculas ranuras para los micrófonos en la parte superior del punto de acceso, las rejillas que delatan discretamente el altavoz en la parte inferior y un interruptor para silenciar el micrófono ambos también en el punto de acceso.

Si ponemos el router patas arriba también veremos la conexión para la red Ethernet tanto de entrada como de salida además de la conexión con la fuente de alimentación. Esto nos da una pista del primer paso de la instalación que veremos más adelante. El diseño del Google Nest Wifi es tan atractivo que la primera prueba no podía ser otra que simplemente colocar los dispositivos en distintos sitios de la casa… para ver dónde quedaban mejor. Como se puede ver en las fotos los componentes de la nueva familia Nest WiFi han pasado esta prueba con nota.

No es que pasen desapercibidos sino que es fácil integrarlos en cualquier tipo de decoración. Por cierto, para que esta integración con la decoración sea perfecta parece ser que el punto de acceso podrá adquirirse en distintos colores aunque en la tienda aún no están disponibles.

Una vez realizado el test decorativo nos propusimos mejorar nuestra instalación inalámbrica con Google Nest Wifi. Siguiendo las instrucciones del folleto incluido de apenas dos páginas conectamos el router mediante un cable Ethernet al router conectado a Internet y lo enchufamos a la corriente. A continuación necesitamos un teléfono o Tablet Android en el que instalaremos la aplicación Google Home. Dentro de la aplicación indicaremos que queremos añadir dispositivos y nos aparecerá el router y las posibilidades básicas de configuración.

En este momento la red empieza a configurarse y en unos minutos sin que nosotros tengamos que hacer nada más que darle un nombre y asignar una contraseña estará lista para funcionar. A continuación podemos instalar el punto de acceso de la misma forma: diciendo a Google Home que tenemos un nuevo dispositivo que configurar. Curiosamente este proceso es bastante más largo que la configuración del router, con mensajes tranquilizadores (que no lo son tantos) y amistosos del tipo “ya queda poco” o “las cosas buenas se hacen esperar”. La razón creemos que se debe a las actualizaciones pero también a que en ese momento es cuando se configura la malla de los dos dispositivos.

Una vez instalados ambos dispositivos con Google Home la red estará funcionando. Dentro de esta aplicación solamente podremos realizar una configuración muy básica y obtendremos pocos datos del uso de la red. Si queremos mayores posibilidades de configuración y más información tendremos que instalar la aplicación Google Wifi. En ella podremos configurar varias acciones como dar prioridad de conexión a ciertos dispositivos o configurar una red de invitados.

Wi-Fi… en familia

El apartado Wifi familiar permite configurar pausas programadas para ciertos dispositivos, pausar la conexión en el momento para éstos o bloquear sitios web con contenidos para adultos. Se pueden crear etiquetas para realizar estas acciones con varios dispositivos a la vez. Todo con un tutorial sencillo que guía paso a paso. Incluso podremos asignar comandos de voz para realizar estas acciones como pausar la Wifi de los más pequeños con una frase predefinida.

También podemos acceder a configuración avanzada como realizar reservas de IP o modificar el funcionamiento de la asignación de direcciones dentro de la red. Son menos funciones de las que podemos encontrar en otros sistemas Mesh pero más que suficientes e incluso demasiadas para un usuario que no necesite realizar una configuración más compleja.

Un apartado interesante es el de la información de la red que se obtiene de forma muy intuitiva. Con sólo pulsar en los dispositivos podremos ver estadísticas del uso de la red de los mismos en tiempo real o el acumulado de un día, 7 días o 30 días. También podemos realizar pruebas de velocidad y de funcionamiento tanto de la red como de la conexión a Internet. Lo cierto es que ambas aplicaciones son intuitivas y fáciles de usar y se nota que están pensadas para un usuario que no quiere complicaciones.

De hecho y ya que el punto de acceso tiene las funcionalidades de un altavoz Google Home podemos preguntar de viva voz, por ejemplo, cuál es la velocidad de Internet. El router Google Nest Wifi realizará la prueba y el punto de acceso nos contestará con el dato.

Buenas prestaciones de malla

Una vez familiarizados con Google Wifi, lo cuál ha sido fácil y hasta divertido (es la primera vez que charlo con un punto de acceso sobre mi calidad de conexión) llega el momento de las prestaciones. A la hora de instalar este tipo de sistemas las razones son múltiples. La principal es sin duda la mencionada mala cobertura de los router estándar de las compañías de telecomunicaciones, pero también hay otras razones como descargarlos de trabajo para que sean menos propensos a fallos o el verdadero motivo de adquirir estos sistemas de malla: que la conectividad sea inteligente.

Si nos conectamos a ella con un dispositivo según nos movamos por la casa el sistema se ocupará de asignarnos la conexión más adecuada y potente sin necesidad de cambiar de red manualmente. Así cambiaremos de punto de conexión según nos movamos, pero también de ancho de banda. El sistema utiliza dos bandas: la de 2.4 GHz (mayor alcance pero menos capacidad de transmisión) y la de 5 GHz (mayor capacidad de transmisión y menor alcance).

Para asignar estos parámetros no solamente se basa en la distancia del dispositivo de cada uno de los nodos sino también del consumo de datos que esté realizando. Google Nest Wifi recurre a la conexión a la nube para calcular mediante inteligencia artificial el uso de datos de un dispositivo basándose en su histórico así como otras funciones. Según Google estos datos no se almacenan sino que solamente se utilizan para la optimización de la conexión.

En realidad existen otros dispositivos de malla que utilizan este sistema para proporcionar siempre la máxima conectividad sin necesidad de cambiar de red. La diferencia de Google Nest Wifi es su implementación de diseño, facilidad de uso y la incorporación de funcionalidades de altavoz. Se pierden a cambio algunas sofisticaciones técnicas como configuración más avanzada, uso de VPNs, compatibilidad con Wifi 6 o la conexión entre router y puntos de acceso mediante una banda de frecuencia dedicada (Google Nest Wifi utiliza la misma de la red).

En nuestras pruebas de rendimiento ha sido entretenido poner en dificultades la inteligencia del sistema pasando de un uso bajo de datos a reproducir vídeo en 4K para ver cómo Google Nest Wifi nos asignaba una banda con mayor capacidad cuando requeríamos mayores prestaciones. Comparados con otros sistemas no se trata desde luego del producto Mesh con más prestaciones, pero la verdad es que se defiende muy bien.

Conclusiones

Mejorar la conectividad en nuestros hogares es un desafío con el que todos nos podemos encontrar pero hasta hace poco era una tarea compleja de afrontar y no siempre con buenos resultados.  Productos como el Google Nest Wifi pueden ser una solución práctica y poco compleja de poner en marcha que además cuenta con un buen diseño y el añadido de proporcionar la funcionalidad de un altavoz Google Home.

Hay que tener en cuenta que no es un producto para el “manitas” que pretende configurar hasta la última de las opciones de su router y tampoco se trata de un kit económico pero le podemos preguntar qué tiempo hace o decirle que ya está bien de Fornite y pausar la conexión de los guerreros de la casa.