El Nexus 4 recibe un pequeño lavado de cara

Google ha introducido de forma silenciosa algunos retoques en el diseño del Nexus 4, el último smartphone hasta la fecha de la compañía. Estos cambios son bastante sencillos y no afectan para nada al aspecto general y mucho menos a la potencia o rendimiento del mismo.

Por un lado tenemos la introducción de una especie de protuberancias de pequeño tamaño en la parte posterior el terminal, un pequeño detalle con el que se pretende evitar que el teléfono se arañe y que el altavoz quede taponado, algo que puede ocurrir con facilidad al dejarlo por ejemplo sobre la mesa.

Por otro lado encontramos un cambio en el diseño de la apertura para el objetivo de la cámara trasera que, como vemos en la imagen, ha visto reducido su tamaño. Algunos podrán pensar que este cambio obedece a un mayor control de la luz que entra al sensor, pero lo dicho no es más que una exageración, así que este cambio parece ser puramente estético. Visto lo visto podemos concluir que los actuales poseedores de un Nexus 4 no tienen motivos para preocuparse por el leve cambio de diseño.