Europa contra Estados Unidos por un ciberespionaje masivo propio de enemigos

Estados Unidos estaría espiando masivamente las redes de telecomunicaciones de sus principales ‘aliados’ en Europa, incluidas las gubernamentales y en cumbres bilaterales, de forma similar al tratamiento empleado para países como China, según revelaciones del diario Der Spiegel que ha enfadado sobremanera en el viejo continente.

‘Con estos amigos para qué queremos enemigos’ vienen a decir indignados las autoridades de la UE que han pedido explicaciones a sus ‘amigos’ estadounidenses a los que amenazan con la suspensión de la negociación sobre libre comercio.

La información de ciberespionaje masivo publicada por Der Spiegel, en línea con el escándalo PRISM y también filtrada por el ex-agente de la NSA Edward Snowden, indica que la agencia de seguridad estadounidense NSA tendría monitorizada masivamente las redes de telecomunicaciones europeas con especial incidencia en Alemania, de donde almacenaría 500 millones de llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes de texto.

«Si las informaciones de medios son correctas, esto trae a la memoria acciones entre enemigos durante la Guerra Fría. Va más allá de la imaginación de cualquiera que nuestros amigos en Estados Unidos vean a los europeos como enemigos», indicó la ministra alemana de Justicia, Sabine Leutheusser-Schnarrenberger.

Por su parte, la comisaria europea de Justicia y Derechos Fundamentales, Viviane Reding, aseguró que «los socios no se espían unos a otros», mientras que desde el partido que respalda a Merkel (virtualmente la jefa de Europa) aseguran que, «el espionaje ha adquirido unas dimensiones que nunca hubiera pensado posibles por parte de un estado democrático».

¿Ingenuidad? Múltiples analistas de seguridad llevan tiempo advirtiendo que nos encontramos en una ciberguerra fría de la que nadie escapa, ni amigos ni enemigos, desde altos dirigentes a usuarios domésticos. Ya decíamos que en un mundo totalmente conectado la privacidad simplemente no existe. Algo que se está confirmando con el escándalo PRISM y las revelaciones de Snowden.