FBI en tecnología de reconocimiento de tatuajes

Los tatuajes son para muchos una auténtica pasión, una forma de expresión y de diferenciación que les permite decorar sus cuerpos de una manera única, aunque algunos lo llevan a extremos exagerados.

Cuestión de gustos, que se diría, aunque el FBI parece estar de acuerdo en ese papel diferenciador que juegan los tatuajes y por ello está trabajando en una tecnología de reconocimiento de tatuajes que no sólo serviría para identificar a personas a través de ellos, sino que además tendría otras muchas posibilidades con el uso de algoritmos avanzados.

Gracias a dichos algoritmos el análisis de los tatuajes de una persona con esta tecnología serviría también para asociarle determinadas ideologías, creencias o incluso detectar conexiones con otras personas que tengan su cuerpo «pintado» con elementos parecidos.

A primera vista la idea no suena del todo bien, pero bien utilizada podría ser muy útil, sobre todo a la hora de luchar contra determinadas formas de crimen organizado y grupos de pandillas, que normalmente utilizan los tatuajes como medio para identificarse y diferenciarse.

No es una mala idea, pero por desgracia parece que el proyecto ha empezado con mal pie, ya que la primera ronda de 15.000 tatuajes se ha obtenido de personas encarceladas, con un consentimiento «dudoso» y se han cedido a terceros para hacer pruebas con los logaritmos.

Debemos unir a esto el hecho de que algunos tatuajes pueden contener nombres o datos íntimos, un detalle que quizá no parezca importante pero que está vinculado al derecho a la intimidad de otras personas y debe ser tratado con mucho cuidado, sobre todo cuando contienen referencias a menores (por ejemplo tatuajes relacionados con hijos).

Dicho esto parece que estamos ante una idea que podría ser positiva pero que se está ejecutando de la peor manera posible y con un respeto casi nulo hacia los «voluntarios» que han participado en el proyecto, cosa poco apropiada para aquellos que se autoproclaman como «el país de la libertad».

Más información: SlashGear.