Montar una base en la Luna es un sueño, pero muy complicado

El deseo de montar una base en la Luna ha sido una constante que se ha repetido desde hace ya muchos años, y desde luego es uno de los grandes sueños de científicos y expertos ya que sentaría un nuevo hito en la exploración espacial y permitiría tener otro punto de arranque en futuras misiones.

Sin embargo la construcción de este tipo de instalación es algo muy complejo, y no tanto por el tema del trabajo y de las labores a realizar, sino sobre todo por las propias condiciones a las que está sujeto nuestro satélite, que al parecer recibe un bombardeo constante de pequeños meteoritos.

Dicho bombardeo no sólo es sostenido sino que además es mayor de lo que se creía en un principio, tal y como revelan nuevos estudios de la Luna que aseguran haber identificado un total de 47.000 nuevos cambios en su superficie.

¿Qué supone esto para la construcción de una base en la Luna?

Pues que la misma tendría que estar construida con materiales sólidos que sean lo bastante duros como para resistir sin problemas impactos de meteoritos pequeños a velocidades de hasta 500 metros por segundo (medio kilómetro por segundo).

Como es evidente esto lo complica todo, tanto la construcción como las posibles labores futuras de mantenimiento, y hace que sea poco recomendable la idea de utilizar módulos inflables, que en principio se mostraban como la opción más económica y sencilla.

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