Vimeo On Demand se establece como videoclub en línea

Vimeo On Demand arrancó el pasado agosto con disponibilidad en 150 países y tras un par de meses de acumular contenidos de repercusión más bien floja, incluidos algunos de producción propia, recibe el primer empujón comercial de relevancia.

Para iniciar esta nueva etapa de negocio Vimeo se ha asociado con el canal de televisión estadounidense Starz y la productora Lionsgate Entertainment y en su catálogo ya parece haber un poco de todo, si bien en el poco sigue estando la clave. De Starz se echan en falta series como Spartacus o Black Sails, que sí están en Netflix y en las plataformas de tele por cable; mientras que el aporte de Lionsgate es más cuantioso, pero igualmente limitado: que nadie espere encontrar Los juegos del hambre o Los Mercenarios.

Más allá de ejemplos puntuales, no obstante, el portal de vídeo más popular del mundo después de YouTube ha visto crecer de manera notable su catálogo de pago y comienza a atisbarse como alternativa a considerar para cierto público.

A diferencia de servicios como Netflix, donde lo que se paga es una tarifa plana que da derecho a consumir todo lo que se desee, Vimeo On Demand se introduce en el sector al estilo de Apple o Google, vendiendo películas, capítulos y temporadas de series de forma individual. Además, existe la posibilidad de alquilar por tiempo limitado a menor precio.

En cuanto a precios y disponibilidad, varían en función del propio contenido y la localización del usuario, que podrá disfrutar de sus compras y alquileres tanto mediante streaming a través de la web y aplicaciones móviles de la plataforma, como descargando si lo prefiere consumir sin conexión.