Tres cosas que no debes hacer tras comprar tu nuevo router

Por fin ha llegado el día, has elegido tu nuevo router y tienes a mano nuestra guía con las tres cosas básicas que debes hacer nada más instalarlo, pero hoy queremos ir un poco más allá y ayudarte a completar el proceso de configuración mostrándote tres cosas que no deberías hacer.

Son consejos sencillos pero estamos convencidos de que te van a ser muy útiles, así que no dudes en ponerlos en práctica.

1-Dejar instalados los controladores que vienen con el router

Cuando compramos un router lo más normal es que venga con un CD de drivers para simplificar el proceso de instalación o que traiga una versión preinstalada que puede ser bastante antigua.

Sin embargo una vez que hayamos completado el proceso y que veamos que todo funciona con normalidad es recomendable entrar en la web oficial del fabricante para buscar actualizaciones e instalar las versiones más recientes.

Mantener el router actualizado es fundamental no sólo para sacarle el máximo rendimiento, sino también para disfrutar de todas sus funciones y para mantenerlo protegido.

2-Dejar las contraseñas por defecto

Los routers suelen venir con una contraseña por defecto tanto para la conexión inalámbrica como para el acceso al panel de control y de gestión del dispositivo.

Esas contraseñas son genéricas y en la mayoría de los casos se encuentran disponibles en listados que son utilizados en ataques de fuerza bruta. Algunas de ellas se encuentran disponibles incluso por Internet, de manera que sólo con conocer el modelo exacto del router sería posible averiguar la contraseña y vulnerar la seguridad del router.

Por ello os recomendamos encarecidamente que nada más completar la instalación del router hagáis un cambio de contraseñas, utilizando frases largas con mayúsculas y minúsculas, números y caracteres especiales.

3-Colocar el router en cualquier sitio

La ubicación del router es muy importante, ya que de su posición dependerán los lugares a los que llegará la conexión inalámbrica y los dispositivos que podremos conectar por cable.

Antes de instalar el router deberíamos pensar en la distribución de nuestro hogar u oficina, en los lugares a los que queremos que llegue sí o sí la señal del WiFi y en los dispositivos cableados que vamos a utilizar.

Con todo eso en mente deberemos buscar el lugar que mejor cumpla con nuestras necesidades. Puede que no encontremos una solución plenamente satisfactoria, pero siempre tendremos la posibilidad de recurrir a un PLC con WiFi.

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