Hisense presenta el monitor para juegos, Gaming TV Ace 2023

El Gaming TV Ace 2023 es un nuevo televisor que ha empezado a vender en China Hisense. Combina el 4K con una gran diagonal y características específicas para jugadores en consolas y PC.

A cualquier televisor se le puede enchufar una consola (o PC) y jugar, pero muy pocos se pueden acercar al rendimiento que alcanzan los mejores monitores. El nuevo modelo de Hisense lo intenta al centrarse por completo en cubrir las necesidades de los jugadores.

Gaming TV Ace 2023, todo por los juegos

El monitor monta un panel ULED de 65 pulgadas de diagonal. Con una resolución nativa 4K, la característica más destacada es una frecuencia de actualización de 240 Hz. Para alcanzar ese nivel, el televisor debe mostrar contenido nativo o almacenado localmente o, alternativamente estar conectado a una potente GPU, RTX 30 o RX6000.

Para ello, cuenta con una entrada de vídeo HDMI 2.1 de prestaciones completas (48 Gbps de ancho de banda), soporte para VRR (tasa de actualización variable) y la tecnología de sincronización de imágenes, AMD FreeSync Premium. Soporta el modo 4K 120Hz para jugar al máximo nivel en consolas de última generación, PlayStation 5 y Xbox Series X.

Sería un desperdicio usar este televisor solo para jugar y por supuesto se puede usar para todo lo demás. Ofrece 1,07 billones de color, un Delta-E de 1.5 y ángulos de visión horizontales y verticales de 178 grados. El televisor tiene tres puertos HDMI (uno de ellos el mencionado HDMI 2.1) y también está bien surtido para conexión a Internet con un LAN Internet y el último estándar inalámbrico Wi-Fi 6.

Está motorizado por un procesador ARM Cortex A73 de cuatro núcleos, con 4 GB de RAM y 32 GB de almacenamiento interno. Completa la configuración un par de altavoces estéreo de 12 W compatibles con Dolby Atmos, así como compatibilidad con HDR (Dolby Vision).

Hisense ya está comercializando su televisor para juegos en China por 5.499 RMB, alrededor de 865 dólares al cambio. No está mal para sus prestaciones y es que no hay demasiados televisores para juegos dedicados.