Razones para emplear una VPN

Si bien hace algunos años los servicios de VPN eran algo complicado y, por norma general, empleado exclusivamente en el entorno profesional, de un tiempo a esta parte hemos vivido una enorme proliferación de este tipo de servicios, que además ahora se dirigen de manera muy directa a los usuarios particulares, a los que se ofrece una modalidad de éstas que resulta muy cómoda, accesible y práctica. Actualmente podemos encontrar servicios VPN muy competitivos en precio y prestaciones, adaptadas a todo tipo de dispositivos y que podemos activar y desactivar a voluntad con un simple click de ratón o una pulsación en la pantalla.

Todo perfecto, salvo una cosa, y es que muchas personas todavía se preguntan para qué pueden necesitar ellos una VPN, qué ventajas les ofrece con respecto a utilizar sus conexiones a Internet sin más, en fin, que no tienen claro si una VPN es algo para ellos y a lo que le vayan a poder sacar partido. La respuesta corta es “Sí, es para ti, la necesitas y le vas a sacar partido desde el primer minuto”. Pero no nos vamos a quedar solo con la versión corta, así que dediquemos unos minutos a detallarlo.

La primera razón, la más importante, es que una conexión VPN nos provee de una capa extra, y además bastante gruesa, de privacidad. Aunque cada vez van siendo más los servicios que ofrecen cifrado de extremo a extremo, todavía son muchos los que no lo hacen, permitiendo de este modo que nuestro tráfico de datos pueda ser analizado por terceros. Una VPN transmite siempre los datos cifrados, eliminando por tanto el riesgo.

Pero es más, incluso cuando empleamos servicios cifrados, el análisis de nuestro tráfico de red puede ser bastante revelador. Es decir, un atacante no podría ver los datos que estamos transmitiendo y recibiendo, pero sí que tendría un completo registro de a qué nos conectamos, a qué horas, con qué frecuencia, etcétera. Información que puede ser empleada con aviesas intenciones de múltiples maneras.

Existe la errónea creencia de que las redes por cable, per se, son seguras. El uso de servicios de VPN también es muy recomendable en las mismas.

Al utilizar una VPN, todo nuestro tráfico de red entrante y saliente estará cifrado y, además, tendrá un único origen y destino, por lo que tu navegación pasará a ser totalmente privada, ya te estés conectando a tu router por cable o mediante wifi o estés accediendo a Internet desde una red pública. Solo por esta razón, el uso de una VPN ya es una opción más que recomendable.

Pero que esa sea la principal razón no significa que sea la única. Quizá te haya ocurrido intentar acceder a una página web que tienes constancia de que está operativa, pero no has podido hacerlo. En tal caso una de la posibles razones para ello es que esté bloqueada en el país desde el que te conectas. Algo parecido ocurre con determinados contenidos en muchas plataformas, cuyo visionado está limitado a determinados países. Y lo bueno de algunos servicios de VPN es que te permiten simular que te conectas a Internet desde otras ubicaciones.

De este modo, ya sea que quieres evitar una ubicación geográfica, o que para acceder a algún contenido quieres simular que te conectas desde una ubicación específica, tan solo tendrás que escoger un país en un selector y, de manera automática, todas las webs y los servicios a los que te conectes pensarán que lo estás haciendo desde ahí.

Como puedes comprobar, hay bastantes razones que explican la proliferación de los servicios de VPN y, más importante todavía, qué te pueden aportar a ti.