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Volkswagen ID.4 GTX, respiración

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Volkswagen ID.4 GTX

Wouldn’t it be nice if we were older? The Beach Boys (Wouldn’t it be nice, 1966)

Seong-Jin se despertó descansado. Hacía mucho tiempo que no conseguía dormir tan plácidamente, sobre todo desde que dejó su trabajo de profesor en la universidad para unirse al Centro de Investigación Científica Nuclear de Yongbyon. Muchas veces le ha mantenido en vela el remordimiento y el reproche a si mismo de no haber tenido la misma valentía que otros colegas suyos que se habían negado a seguir el juego del gobierno en su carrera por disponer de su propia amenaza nuclear. Muchos de esos compañeros, brillantes científicos, habían desaparecido o sobrevivían con empleos alejados de sus capacidades. Pero Seong-Jin tenía en su mente algo que no podía dejar que se agostara gesionando un puesto de comida callejera o llevando la contabilidad de una casa de costura. Algo germinaba en la brillante mente del científico desde la universidad. Algo que había procurado no compartir con nadie y camuflarlo como investigación para conseguir un artefacto nuclear aún más mortífero. Se bajó de la cama con cuidado para calzar sus sandalias. Su espalda le estaba molestando últimamente, así como las rodillas y el cuello… como si ochenta agostos hubieran pasado a reclamar su deuda de repente.

Y es que una energía casi mística le había poseído todos estos años alimentando sus días de laboratorio, sus noches machacando ecuaciones en secreto en el ordenador del instituto con la única compañía del personal de la limpieza, y las madrugadas en vela intentando que todo encajara con esa angustia de sentir que la respuesta estaba cerca, que casi podía percibir su aliento en la cara. Años solitarios pero intensos. También había dedicado no pocas horas para conseguir una conexión y un correo electrónico no detectable por las autoridades, precisamente para hacer lo que finalmente había podido hacer anoche. La noche en la que todas las piezas encajaron. La noche en la que Seong-Jin había enviado toda la documentación sobre sus trabajos a los cinco colegas de todas las partes del mundo con los que había contactado en secreto durante estos años. Sonrió al leer la respuesta del profesor Stuart de Londres. Parafraseaba una cita de Arthur C. Clarke «Cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia. ¡Esto que me has mandado es pura magia amigo mío!» Entonces escuchó el ruido de las botas en el pasillo.

La determinación con la que desde hace ya unos cuantos años el fabricante alemán Volkswagen se ha volcado con el desarrollo de una línea de vehículos eléctricos hay que reconocer que es muy importante. También es cierto que se ha encontrado con no pocos obstáculos en su camino por la electrificación y el desarrollo de su familia ID con problemas de todo tipo incluido el software o las baterías, lo que le ha llevado por cierto a tomar decisiones estratégicas importantes que darán su fruto en los próximos años.

Volkswagen ID.4 GTX

Modelo analizado Volkswagen ID.4
Motor y acabado GTX 299 CV
Potencia 299 CV
Velocidad máxima 180 Kmh
Aceleración o-100 6,2 s
Largo/ancho/alto 4582/1852/1616 mm
Potencia máxima RPM 299 CV
Par máximo Nm/RPM 460 Nm
Caja de cambios Automática
Web https://www.volkswagen.es/
Precio 55.360 euros (antes de ayudas y descuentos)

Aunque el ritmo de lanzamiento de nuevos modelos quizás no ha respondido a los planes por las mencionadas dificultades unidas al clima internacional, lo cierto es que Volkswagen ya puede mostrar un envidiable catálogo de modelos, muy necesario para competir en un mercado que empieza a estar muy poblado de alternativas. En esta ocasión hemos podido probar la versión GTX del modelo ID.4 de Volkswagen, que pudimos conducir brevemente durante su presentación en una versión más «tranquila».

Hermano ID.3

La gama ID.4 propone un vehículo basado en la misma plataforma que su hermano y pionero de la gama ID.3 pero con un mayor espacio interior con una propuesta de diseño que se queda a medio camino entre un monovolumen y un SUV, algo más elevado pero sobre todo más grande. En cuanto a las cifras esta versión GTX equipa tracción a las cuatro ruedas mediante dos motores eléctricos de 102 caballos para el delantero y 204 para el trasero y una batería de 77 kWh que permite una autonomía teórica homologada de 499 kilómetros.

El aspecto del ID.4 es el de un coche grande, imponente, con unas dimensiones que superan las de muchos SUV de tamaño medio/grande mientras que la altura es inferior, sobre todo por la menor distancia con el suelo que es más cercana a la de un turismo. En el frontal, como es habitual en los coches eléctricos que no necesitan grandes tomas de aire, no encontramos una gran parrilla sino simplemente una estrecha línea que une los grupos ópticos superiores. Más abajo sí que encontramos una parrilla bajo el parachoques que se ocupa de llevar aire al sistema de refrigeración de las baterías.

En los laterales del parachoques se han introducido unos huecos profundos en los que colocar las luces de posición con tres lámparas led en esta versión GTX. Llama la atención lo agresivo del morro que se extiende hacia adelante con una serie de volúmenes sobre el capó y los laterales que le dan mucho carácter al conjunto. En esta versión GTX además el paragolpes se ha pintado del mismo color de la carrocería para darle un aire algo más deportivo al conjunto.

Grandes llantas

En el lateral enseguida mandan las imponentes llantas de de 20 pulgadas que pueden llegar a ser de 21 en ciertas versiones y que tiene un diseño aerodinámico pero con cierto aire deportivo. Por lo demás la línea del ID.4 tiene un diseño aerodinámico con toques deportivos como el del Spoiler trasero o el diseño de los volúmenes de la chapa de los laterales. En la versión GTX la pieza de plástico en la parte inferior de las puertas también viene pintada en el color de la carrocería (como en la versión 1st que probamos en su día).

En la parte de atrás también encontramos una pieza que une los dos grupos ópticos que se colocan muy arriba casi donde termina el cristal del parabrisas del portón trasero. Bajo este elemento el paragolpes tiene un diseño dividido en tres volúmenes principales donde el superior que se encuentra justo debajo de las luces es el más prominente. Sobre esta parte y en el centro se coloca la identificación del modelo. En la parte inferior encontramos unas defensas para la parte inferior en plástico de color gris.

El interior del ID.4 GTX

La baza más fuerte de este ID.4 es desde luego el espacio interior y esto salta a la vista en cuanto abrimos las grandes puertas. Se han aprovechado al máximo las ventajas de la mecánica eléctrica para que el interior sea lo más diáfano posible y que haya el mínimo número de obstáculos. Esta filosofía de sencillez y minimalismo también está presente en el salpicadero, que se encuentra más retirado de lo habitual y deja más espacio para las piernas en las plazas delanteras.

Este minimalismo también lo percibimos en los controles y las pantallas con indicadores y sistema de información y entretenimiento. En algunos casos esta sencillez resulta quizás excesiva. Y es que en el apartado de los indicadores este modelo hereda los mismos que encontrábamos en el ID.3, una pantalla de pequeño tamaño colocada sobre el volante que da una información realmente escueta: solamente la velocidad, la carga de la bateria y una fina línea que indica si el coche está recuperando o consumiento energía. También aparecen indicaciones de navegación (incluso las de Android Auto) y las señales de limitación de velocidad detectadas.

En este afán de simplificación y al igual que ocurre con el ID.3 el selector del cambio está pegado a la mencionada pantalla con una peculiar pieza separadora en color negro brillante. Una peculiaridad de estos modelos es que para poner en marcha el coche no es necesario pulsar un botón de encendido sino simplemente engranar la marcha, con el freno pisado, y a continuación pisar el acelerador. De hecho enlos pedales del acelerador y del freno están marcados con los símbolos «play» y «pause» heredados de los reproductores de sonido de antaño…

Acabados superiores

La pantalla principal se encuentra en el salpicadero «flotando» sobre el mismo en la parte superior. Como en el ID.3 es posible controlar una gran cantidad de sistemas desde el mismo, lo que en ocasiones hace algo confuso su funcionamiento, pero podemos decir que es posible adaptarse sin demasiadas dificultades. La impresión es que con las sucesivas versiones de software (no parece que el hardware se haya actualizado) el sistema funciona de forma mucho más fluida que cuando probamos el ID.3 en junio de 2021. La magia de las actualizaciones «over the air»…

En lo que respecta a los acabados seguimos encontrando algunos aspectos mejorables como los elementos en plástico negro brillante y los sensores táctiles en vez de botones o diales tradicionales para el climatizador y otras funciones. Sin embargo en esta versión GTX se han cuidado más los materiales como el cuero sintético con costuras en la parte superior del salpicadero y en las puertas de tacto mucho más agradable que los plásticos duros de otras versiones. También resaltar los asientos de diseño deportivo en el que el reposacabezas está integrado con el resto del asiento fabricados con una tela de tacto muy agradable.

Hay mucho espacio entre los dos asientos delanteros que se ha aprovechado para incorporar una consola muy útil con distintos espacios para objetos incluído una ranura para depositar el teléfono móvil que dispone de carga inalámbrica y de conexión USB. El único pero que podemos ponerle es el material que recubre en la parte delantera la zona de los posavasos que al ser de negro brillante «atrae» el polvo de forma inexorable. Debajo de la mencionada consola (tal y como ocurre en el ID.3) hay un espacio que da la sensación de convertirla en un elemento casi flotante.

En la parte trasera el espacio es excepcional, hay pocos coches de este tamaño en el que los pasajeros puedan viajar con la comodidad en la que se viaja en un ID.4. El suelo no tiene ningún elemento que impida poner los pies lo que hace que cualquiera de los ocupantes pueda colocar las piernas de la forma más cómoda. Falta un poco de espacio en anchura para que un tercer pasajero pueda viajar con comodidad en la plaza central, también por la presencia del reposabrazos que hace que el respaldo sea algo menos cómodo en esa plaza.

Gran maletero

En lo que respecta al maletero es otro de los puntos fuertes de este ID.4 ya que tiene una capacidad de 543 litros y unas formas regulares que hacen muy cómodo la posibilidad de colocar objetos de distintos tamaños. Además dispone de ganchos y enganches para colgar objetos y fijar la carga pero no bolsillos para colocar objetos más pequeños como hay en otros modelos de la misma marca aunque sí dos huecos en los laterales. El doble fondo permite almacenar el cable de carga.

Para pasar a las pruebas dinámicas tenemos en cuenta como es costumbre las prestaciones del vehículo. Los 299 caballos son muy respetables, aunque hay ya bastantes modelos de la competencia que la superan. Como ya mencionamos la tracción es integral y en lo que respecta a la cifra de par dispone de unos muy respetables 460 Nm. Pero para poder valorar lo que puede hacer esta potencia y este par tan altos hay que tener en cuenta también que el peso de este ID.4 es de 2.224 kilos, 100 más que un ID.4 «normal» y nada menos que 288 kilos más que un ID.3 con la misma batería.

A pesar de esa gran diferencia de peso el ID.4 GTX es un coche ágil que no tiene problemas en recuperar y acelerar desde parado de forma rápida. Sobre el papel tarda 6,2 segundos en acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora frente a los 7,9 del más ligero ID.3 de 203 caballos. En ciudad se aprecia que es un coche muy manejable para su tamaño con un radio de giro reducido. Como es habitual se trata de un coche silencioso y siempre dispuesto a saltar a la presión del acelerador.

Equilibrio

En carretera se nota que en Volkswagen han preferido mantener un equilibrio entre confort y conducción deportiva antes que primar la agilidad en curva. Aunque podemos afrontar carreteras con curvas son problemas no se trata un coche que enganche virajes cerrados con demasiada agilidad ni que admita correcciones jugando con el acelerador o que transmita demasiado al conductor. Es un coche seguro que tiene reacciones nobles y es muy confortable, sobre todo en autopista, pero le falta algo de dinamismo que podemos encontrar en todas las versiones deportivas de los modelos Volkswagen de combustión que hemos podido probar.

Una curiosidad es que el fabricante ha ajustado la limitación de velocidad a 180 kilómetros por hora. En nuestras pruebas en carretera los consumos han rondado los 22 kWh con velocidades sostenidas por lo que la autonomía se acerca a los 350 kilómetros que es suficiente para viajes cortos. Además el sistema de carga rápida permite hasta 135 kWh lo que es una ventaja a la hora de afrontar viajes más largos. Eso sí, conviene tener en cuenta que la mayoría de los cargadores que vamos a encontrar no pasarán de los 50 kWh. Si queremos cargar a mayor velocidad habrá que consultar las condiciones de los cargadores antes de hacer la parada.

Conclusiones

Este ID.4 GTX nos ha confirmado todas las cosas buenas que pudimos conocer cuando realizamos la prueba de contacto de este modelo: una habitabilidad excelente, un buen confort de marcha y una respuesta muy buena para la conducción dinámica, superior incluso a la del ID.3. Eso sí, el peso de esta versión de ID.4 y el tarado de elementos como las suspensiones penaliza un poco a quienes quieran una conducción algo más deportiva que sí se puede conseguir con modelos orientados a este cometido de la competencia. Notable la mejora de los sistemas con respecto a los primeros modelos.

Nos sigue pareciendo excelente la habitabilidad y la luminosidad del habitáculo así como el tamaño del maletero. Tanto las prestaciones del coche como su autonomía nos permiten pensar en viajes, siempre planificados, y su agilidad en ciudad y su suavidad por recorridos urbanos hacen que sea un coche apto para todo uso a pesar de su tamaño. Nos ha parecido un buen componente de la familia ID para quien necesite más espacio y algo más de prestaciones, aunque en el aspecto deportivo no despierte las emociones esperadas por el pedigrí de la marca en este sentido.

Valoración final
8.5 NOTA
NOS GUSTA
Buen confort de marcha
Habitabilidad
Maletero
A MEJORAR
Algunos acabados
RESUMEN
Un coche que sin ser deportivo tiene buenas prestaciones y un buen compromiso con el confort con una habitabilidad muy buena y un gran maletero que con una buena autonomía le hacen compatible con los viajes.
Prestaciones9
Diseño8.5
Consumo7.5
Confort9
Sistema de infoentretenimiento8.5

 

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