El futuro de Microsoft depende de un Windows gratis

Así de rotundos se manifiestan los chicos de TNW en un editorial donde apuestan por un Windows gratis. Un concepto que hemos comentado por aquí en varias ocasiones y que sería uno de los mayores cambios de la historia del desarrollo de los sistemas operativos de Microsoft.

El tipo de distribución y precio fueron algunas de las dudas no resueltas en la presentación de Windows 10 y todo apunta que habrá novedades importantes en este terreno, en medio de una tendencia de gratuidad de actualizaciones de los sistemas operativos, imparable incluso para Microsoft.

Las actualizaciones de los sistemas operativos están perdiendo valor una vez que el usuario se ha acostumbrado a recibir actualizaciones gratuitas para los dispositivos móviles en todas las plataformas, y con Apple, Google y los desarrolladores de distribuciones GNU/Linux ofreciéndolas igualmente gratis. Los analistas creen que solo es cuestión de tiempo que Microsoft tenga que entregar un Windows gratis.

Microsoft ya ofrece actualizaciones gratuitas para Windows Phone y si el hardware aguanta, lo hará durante toda la vida del dispositivo. Por otro lado, la compañía ha comenzado a regalar Windows en la comercialización de tablets de hasta 9 pulgadas con el objetivo de aumentar ventas e intenta compensar las pérdidas con el aumento de servicios adicionales como el buscador Bing, Skype o la suite de productividad Office 365.

¿Por qué este modelo no se aplica todavía al PC Windows?

TNW explica que si Microsoft quiere retener el férreo control sobre el futuro del mercado del PC es necesario que separe el mercado empresarial y el de consumo: «Es totalmente razonable esperar que las empresas paguen por licencia de software de licencia aunque sólo sea para recibir actualizaciones y soporte extendido pero esperar que el usuario final gaste más de 100 dólares en actualizar su sistema cada dos años, es ridículo«. 

Muchos consumidores vinculan un cambio de Windows a un reemplazo de sus PCs y así, vemos como un 75 por ciento del mercado del escritorio sigue en manos de Windows 7 y Windows XP. Un Windows gratis conseguiría migraciones masivas a Windows 10 y seguramente «usuarios más dispuestos a pagar por servicios asociados como Office 365 u OneDrive».

Cada vez se venden menos PCs -el verdadero granero de Microsoft al controlar las pre-instalaciones- y la firma podría buscar alternativas a la venta de Windows. La decisión es difícil porque Microsoft ingresa 5.000 millones de dólares anuales por licencias de sistemas operativos pero es seguro que está sobre la mesa de los máximos ejecutivos. Según TNW la dedisión ya está tomada: «los días de actualizaciones de Windows pagados han llegado a su fin incluso si Microsoft no lo haya anunciado todavía».