¿Qué secretos esconde la Gran pirámide de Guiza?

Encontrar respuestas sobre el cómo, porqué y quién construyó la Gran pirámide de Guiza es el objetivo del proyecto «Scan Pyramids», a cargo de un grupo de expertos internacionales que ha comenzado a trabajar en Egipto utilizando tecnologías avanzadas pero no invasivas, como termografía infrarroja, detección de muones, láseres y drones.

Y hay novedades dos semanas después de comenzar porque los investigadores dicen haber encontrado diferencias de temperatura en varios bloques lo que indica que «hay algo detrás», un área localizada en la base de la pirámide con una temperatura seis grados más alta que el resto. No se conoce el motivo de esta anomalía que podría responder simplemente a otros materiales distintos a los de los bloques analizados o a una sala oculta, corredor o «pasadizo que divide la cara este de la pirámide», desconocido hasta ahora.

También se ha descubierto otras tres zonas con diferente temperatura en la mitad superior de la pirámide. Tres puntos que según los investigadores explican que hay aire caliente que proviene del interior de la pirámide. Como en el anterior, no se conoce a qué responden y se puede tardar «un día o un año» en descubrirlo, explican responsables de la investigación.

«Convocaremos a todos los egiptólogos interesados en la arquitectura del antiguo Egipto para que piensen con nosotros lo que hay realmente aquí», explica el ministro de Antigüedades egipcio, Mamduh al Damati, que además de «descubrir secretos» pretende relanzar el turismo en Egipto, su primera industria, hoy amenazada por todo lo que está sucediendo en la zona.

Además de en la Gran pirámide se pretende actuar en toda la zona de Guiza y en la de Dahshur, realizando una reconstrucción en 3D de las pirámides, la esfinge y todos los monumentos. Se utilizarán drones que tomarán miles de fotografías a distintas aluras para entender cómo se pudo construir la pirámide, fotogrametría, la termografía infrarroja mencionada o la interesante técnica de detección de muones, las partículas de energía que penetran los objetos y se puede descubrir si hay cámaras ocultas.

Por el momento, toda la investigación se realizará «sin tocar una sola piedra» mediante técnicas no invasivas. A pesar de ello se esperan obtener resultados y conocer por fin «los secretos de las pirámides», especialmente la manera de hacerlo. Hasta ahora la arqueología parece tener muy claro que la Gran pirámide de Guiza está dedicada a servir como tumba del faraón Keops y que fueron suficientes miles de obreros, rampas y cuerdas para construirla.

Otros estudiosos (incluyendo ingenieros y expertos) dicen que esa teoría no se sostiene, comenzando por la fecha de construcción que podría ser muy anterior, por la impresionante alineación y orientación realizada sin instrumentos ópticos, el pulido de las losas exteriores, cómo se cortaron los bloques, cómo se colocaron los dos millones y medio de bloques para completar tres millones de metros cúbicos de volumen y a tal altura o cómo los egipcios de la época perdieron esos conocimientos técnicos en dinastías posteriores. Obra colosal e irrepetible de la que se espera descubrir sus secretos aunque quizá nos deje aún más misterios.

Hay centenares de documentales disponibles con explicaciones oficiales y oficiosas sobre la construcción de la Gran pirámide de Guiza. Si te gustan las «teorías alternativas» una buena recomendación es la realizada por el Dr. Jiménez del Oso, Pirámides – La obra Imposible. La calidad del vídeo no es la mejor pero es una referencia a la hora de mostrar las dudas sobre la explicación oficial.