El Galaxy S9 se hará con todos los Snapdragon 845 en su lanzamiento

La cercanía que existe entre Samsung y Qualcomm ya dio problemas a otros fabricantes el año pasado y parece que en 2018 la historia volverá a repetirse, ya que la firma surcoreana se ha asegurado todo el suministro inicial del Snapdragon 845 para utilizarlo en el Galaxy S9 (y en el S9+).

El Galaxy S9 será el próximo smartphone tope de gama de Samsung para 2018, un terminal que mantendrá la dualidad de SoCs Snapdragon y Exynos. Los primeros son diseñados por Qualcomm y fabricados por la división de semiconductores de Samsung, así que no es extraño que la firma surcoreana tenga un trato de favor por parte de la británica.

Esto tendrá consecuencias importantes en el sector smartphone, tanto para los consumidores como para algunos fabricantes. El hecho de que la firma coreana se asegure todo el suministro inicial de SoCs Snapdragon 845 implica que firmas como LG tendrán que elegir entre lanzar un G7 «descafeinado» o esperar a una segunda partida por parte de Qualcomm.

Si recordamos lo ocurrido con el lanzamiento del LG G6 podemos entender mejor y poner en perspectiva esta información. Samsung se aseguró todo el suministro inicial del Snapdragon 835, lo que obligó a su rival directo a lanzar un tope de gama equipado con un Snapdragon 821, un SoC de 2016.

Esa situación podría repetirse en 2018, salvo que LG logre cerrar un acuerdo concreto con Qualcomm o retrase el lanzamiento del G7 al segundo trimestre de dicho año.

Por su parte otros fabricantes como Sony y HTC suelen presentar sus smartphones tope de gama con posterioridad, así que no deberían tener problemas.

Más información: GSMArena.