El Samsung Galaxy Watch 4 incluirá medición de azúcar en sangre

Lo que comenzaron siendo unos dispositivos meramente secundarios de los teléfonos inteligentes, se han convertido ya en una de las nuevas tecnologías más pioneras. Y es que los smartwatches y bandas de seguimiento continúan aumentando cada vez más sus funcionalidades, ofreciendo métricas no sólo deportivas, sino adentrándose cada vez más en el ámbito médico-sanitario.

Un ejemplo claro nos lo muestra el próximo Samsung Galaxy Watch 4, que a las grandes actualizaciones de medición de la presión arterial o los electrocardiogramas (ECG) vistas en su predecesores, según han compartido desde el medio coreano ET News, también sumará la esperada función de medición de glucosa (azúcar) en sangre.

Así pues, este método podría ayudar a reducir el tener que pasar por el no tan agradable método actual para la medición, que pasa por un pinchazo y la consiguiente extracción de sangre para la prueba, ofreciendo un sistema igualmente válido y rápido. Si bien todavía faltan por conocer algunos detalles sobre su funcionamiento completo, esta medición de la glucosa se realizaría mediante sensores ópticos, permitiendo una lectura aproximada y constante de los niveles de azúcar.

Aunque tal y como afirman desde este medio, sin llegar a sustituir a los propios glucómetros. Y es que tal y como ocurre actualmente con las funciones de medición de presión arterial, seguramente siga siendo necesaria una calibración cada cierto tiempo, utilizando los datos y mediciones de un aparato dedicado.

Adelantándose así al también esperado reloj de Apple, se espera que el Samsung Galaxy Watch 4 se presente junto a la nueva familia de teléfonos inteligentes de gama premium de la compañía, apuntando a una fecha cercana a principios de verano de este mismo año.

Sin embargo, todavía quedaría pendiente saber si Samsung logrará recibir la aprobación necesaria para la implantación de un medidor de glucosa en sangre en sus relojes inteligentes de consumo, ya que actualmente en Europa todavía seguimos esperando a la aprobación de las organizaciones sanitarias para las últimas funciones de electrocardiograma y de la lectura de presión sanguínea.