Conecta con nosotros

Noticias

España prohibirá las cajas de botín a los menores

Publicado

el

España prohibirá las cajas de botín a los menores

Cajas de botín, lootboxes, gachapon o juegos gacha… la industria del juego ha evolucionado sustancialmente los últimos diez años, y si en algunos aspectos ha sido para bien, en otros, desgraciadamente, la tendencia ha sido justo la contraria. Y el modelo de facturación es, con diferencia, el ejemplo más claro de ello. Hemos pasado de un precio cerrado por un juego, que en todo caso se podía incrementar por alguna expansión, a un modelo en el que es necesario pasar por caja para prácticamente todo.

Primero fueron los DLC, después llegaron las tiendas dentro de los juegos y, más o menos al tiempo, los pases de temporada para los juegos, y lo más reciente, aunque ya lleva tiempo entre nosotros, son las cajas de botín o lootboxes en inglés, un modelo comercial que ha logrado hacer que veamos con buenos ojos el de las tiendas en los juegos, puesto que en estas al menos podías comprar lo que deseabas, en vez de tener que jugarte tu dinero en un sistema calcado al de las tragaperras.

Por si no lo conoces, el modelo de las cajas de botín consiste en poner a la venta cofres, cajas, sobres o cualquier otro formato (siempre en digital, por supuesto) que pueden contener una gran cantidad de ítems distintos, entre los cuales podemos encontrar algunos muy codiciados en el juego. Desde jugadores de fútbol en FIFA hasta armas en Counter Strike: Global Offensive. ¿Quieres obtener al mejor jugador para tu equipo? ¿Obtener el arma definitiva? Pues «tan solo» tienes que comprar cajas de botín y cruzar los dedos, a ver si tienes suerte.

Ya puedes imaginar, claro, que hay una relación inversamente proporcional entre el interés que suscita cada ítem y las posibilidades de obtenerlo. Un modelo, de nuevo, similar al de las tragaperras de bar, en las que nada queda al azar. Un sistema para impedir que puedas comprar, por dos o tres euros, un arma que te puede llevar a gastar decenas o incluso centenares de euros para intentar obtenerla en las cajas de botín. Suena nauseabundo, ¿verdad? Pues efectivamente, lo es.

Ya te hablamos de las cajas de botín hace unas semanas, cuando finalmente algunos reguladores decidieron que ya era suficiente, que resultaba imprescindible empezar a imponer regulaciones severas a esta despreciable técnica, dirigida a explotar las debilidades de usuarios que, una vez enganchados a los juegos, pueden llegar a desembolsar auténticas fortunas para hacerse con la recompensa deseada. Y esto no es teoría, ya se han dado muchos casos en este sentido, de personas arruinadas por culpa de las cajas de botín.

Así, hoy hemos recibido una noticia sensacional, y es que, según informa ElDiario, el ejecutivo español ya está trabajando en una ley para regular las cajas de botín que prohibirá el acceso a las mismas a menores de 18 años. Para limitar el acceso, el anteproyecto de ley, que se encuentra en proceso de audiencia pública hasta el 23 de julio, plantea que sea necesaria la acreditación mediante DNI, y podrá complementarse con sistemas de identificación biométricos, no con biomarcadores, como podemos leer  en una gran cantidad de medios.

España prohibirá las cajas de botín a los menores

La limitación del acceso a menores a las cajas de botín se recoge en el capítulo II, artículo 6, del anteproyecto:

Capítulo II

Medidas de protección de los usuarios de mecanismos aleatorios de recompensa.

Artículo 6. Prohibición de utilización de mecanismos aleatorios de recompensa por menores de edad.

 1. Queda prohibido el acceso a los mecanismos aleatorios de recompensa o su activación por
personas menores de edad.

2. Con el fin de garantizar la efectividad de esta prohibición, las entidades que exploten o comercialicen mecanismos aleatorios de recompensa deberán habilitar un sistema de verificación documental de la identidad de los participantes. Este sistema de verificación podrá complementarse, siempre con carácter voluntario para estas entidades, con un sistema de identificación biométrica.

El acceso a los mecanismos aleatorios de recompensa o su activación por el usuario no podrá realizarse hasta que se haya verificado su identidad en los términos previstos en este apartado.

3. En el ejercicio de sus competencias de inspección la Dirección General de Ordenación del Juego podrá requerir los datos relativos a las verificaciones de identidad realizadas en virtud de lo dispuesto en este artículo.

4. La verificación de la identidad de los participantes se realizará con pleno respeto a lo dispuesto en el Reglamento (UE) 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de abril de 2016, relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de estos datos y por el que se deroga la Directiva 95/46/CE, en la Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales, y en su normativa de desarrollo.

5. Las entidades que exploten o comercialicen mecanismos aleatorios de recompensa deberán habilitar mecanismos de control parental que permitan excluir completamente, y para cualquier tipo de dispositivo, la compra o la utilización de este tipo de mecanismos.

(Puedes consultar el anteproyecto completo en este enlace.)

La clave, a partir de este punto, para determinar el éxito o el fracaso de esta medida, radica fundamentalmente en la eficiencia y fiabilidad de los sistemas de validación empleados por las desarrolladoras para limitar el acceso a las cajas de botín de sus juegos. A este respecto resulta muy importante lo que podemos leer en el punto 3 de artículo 6, es decir, que la Dirección General de Ordenación del Juego podrá supervisar, de manera activa, los procesos de verificación llevados a cabo para impedir el acceso de los menores a las cajas de botín.

Personalmente, reconozco que iría un paso más allá, y es que en el punto 2, establecería como obligatorio el uso de sistemas de identificación biométrica (o alternativas como acceso MFA) para validar cada operación de compra. No obstante, este me parece un movimiento muy importante en la dirección correcta y, por lo tanto, espero que la tramitación de esta ley (por ahora anteproyecto) sea tan rápida como resulte posible, y que de este modo el acceso a las cajas de botín por parte de menores deje de resultar posible y, por lo tanto, un problema.

Si me dieran una cana por cada contenido que he escrito relacionado con la tecnología... pues sí, tendría las canas que tengo. Por lo demás, música, fotografía, café, un eReader a reventar y una isla desierta. ¿Te vienes?

Lo más leído