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La muerte de un youtuber
El fallecimiento de un youtuber puede parecer, en primera instancia, algo de lo más normal del mundo, pues al final es ese y no otro el destino que todos compartimos. Así que, ¿qué tiene de especial la muerte de un youtuber? ¿Qué es lo que hace que sea algo reseñable, incluso noticioso? ¿Por qué estoy escribiendo (y tú estás leyendo) sobre la muerte de un youtuber?
Empecemos por ponerle nombre. El youtuber fallecido se hacía llamar Technoblade, aunque su nombre real era Alex, y creaba contenido sobre Minecraft para su comunidad, formada por más de 12,8 millones de seguidores. Es cierto que durante los tiempos ya casi no publicaba videos, pero claro, enfrentars e al cáncer es un trabajo a tiempo completo. Un trabajo que finalizó trágicamente con el fallecimiento de Alex hace unos días. Tenía 23 años.
Como despedida de su comunidad, Techoblade grabó y subió un video a su canal, un video en el que, en resumen, daba las gracias por todo y se mostraba feliz por la vida que iba llevado. Un ejercicio de reflexión compartida, aprovechando las propiedades de la plataforma en la que ha podido, durante años, hacer lo que más le gustaba y convertirlo en una profesión. Algo verdaderamente envidiable.
Si tienes curiosidad por el vídeo de despedida de Technoblade, en el que también participan sus padres, puedes verlo a continuación:
Pero vuelvo a la pregunta inicial. Más allá de que Technoblade fuera una celebridad en la comunidad de Minecraft, ¿es noticia la muerte de un youtuber? Pues precisamente creo que eso es lo más destacable, que sí. De la misma manera en que, desde hace ya mucho tiempo, es noticia la muerte de músicos, actores, celebridades y personas que han llevado a cabo una labor destacable, los creadores de contenidos con gran popularidad se suman a ese mismo tren.
Para los más mayores, y especialmente para aquellos que no se sienten especialmente atraídos por el moderno ecosistemas de creadores de contenido, youtubers, streamers, etcétera, esto casi puede resultar una ofensa. Dedicar un obituario a una persona que subía vídeo sobre Minecraft a YouTube cuando hace unas semanas lo hicimos con Vangelis, Andrew Fletcher, Dave Smith, Bernie Stolar, etc. es, sin embargo, un reconocimiento de que, vayan más o menos con nosotros, hablamos de figuras públicas que han sabido ganarse su espacio… y es un espacio muy grande.
El caso de Alex es bastante especial, puesto que hablamos de una persona muy joven. Morir con 23 años casi es algo contra natura. A día de hoy los creadores de contenido son bastante jóvenes (algunos ya han alcanzado los 40, pero salvo contadas excepciones son los más veteranos del sector), por lo que cabe esperar que todos ellos aún vivan bastantes años. Sin embargo, casos como el de Technoblade, el youtuber que nos ha dejado, son los primeros de algo que, a medio y largo plazo, ocurrirá de manera más habitual.
¿Qué tiene de especial la muerte de un youtuber? Para algunos, quienes no lo conocían, probablemente nada. Para su comunidad, indudablemente mucho. Y, sin embargo, que medios como The Verge se hagan eco de ello, es una señal tanto para unos como para otros de que, sigamos o no este tipo de contenidos, tengamos 20, 40 o 60 años, los «nuevos» (cada vez son menos nuevos, en realidad) creadores ya forman parte del ecosistema de la comunicación, de las celebridades y, por lo tanto, también de los obituarios. Un hito tan poco agradable como indiscutible.