La CPU de PS5 solo tiene 6,5 núcleos libres para juegos

DigitalFoundry ha confirmado, a través del análisis de rendimiento de Gotham Knights, que PS5 reserva 1,5 núcleos de su CPU al sistema operativo y las aplicaciones. Hace tiempo que sabemos que Xbox Series X reserva también un núcleo de su CPU y 2,5 GB de memoria unificada al sistema operativo y a las aplicaciones básicas, pero con la consola de Sony no teníamos todavía clara esa información.

No ha trascendido todavía la cantidad exacta de memoria unificada que reserva PS5 al sistema operativo y a sus aplicaciones principales, pero las últimas informaciones que habíamos visto apuntaban a entre 2 GB y 2,5 GB. Es una cifra perfectamente creíble, ya que PS4 reservaba 2,5 GB y tenía, por tanto, 5,5 GB libres para juegos.

¿Qué supone esto y por qué es importante? Pues es muy sencillo, supone que los desarrolladores tienen disponibles, para juegos, una CPU de 6,5 núcleos que funciona a un máximo de 3,5 GHz (puede bajar de esa frecuencia), y que además solo tienen libres entre 13,5 GB y 14 GB de memoria unificada, que se utiliza como RAM y VRAM de forma indistinta.

A todo lo anterior debemos unir, además, que la CPU que utiliza PS5 está basada en Zen 2, pero utiliza un diseño personalizado que recorta tanto la FPU como la caché L3. A efectos comparativos, un procesador Ryzen 5 3600 también utiliza la arquitectura Zen 2, pero como podemos ver en el cuadro adjunto tiene cuatro veces más caché L3, funciona a 4 GHz estables en todos sus núcleos y además el diseño de su FPU es claramente superior.

Si ponemos todo esto en contexto la conclusión que podemos sacar está muy clara, un Ryzen 5 3600 es muy superior al procesador de PS5, y como os dije en su momento no necesitamos un Ryzen 7 3700X de 8 núcleos para tener un PC a la altura de la consola de Sony, por mucho que otros se empeñaran en apuntar erróneamente en la dirección contraria.

En su análisis de Batman Arkham Knights, DigitalFoundry ha utilizado un PC configurado con un Ryzen 5 3600 y una GeForce RXT 2060 Super, y este ha conseguido unos resultados muy superiores a los de PS5 en dicho juego. Esto también confirma, una vez más, lo que os he venido diciendo prácticamente desde que se empezaron a filtrar los primeros detalles de dicha consola, que se había generado un «hype» sin sentido, y que en términos de potencia la «nueva generación» era más bien una decepción.

Si queréis más información sobre este tema os invito a repasar este artículo dedicado a cinco cosas que no necesitas para montar un PC al nivel de PS5 y Xbox Series X. En cuanto al análisis de Gotham Knights, el juego es un auténtico desastre y un claro ejemplo de cómo no se deben hacer las cosas. Sufre un importante cuello de botella a nivel CPU, provocado por una optimización muy pobre, y la carga de shaders se ha implementado tan mal que dicho juego sufre un problema de stuttering constante. os dejo el vídeo para que podáis verlo con más detalle.