Las placas base GIGABYTE 600 y 700 admiten hasta 192 GB de DDR5

GIGABYTE ha confirmado que sus placas base con socket LGA1700 y chipsets serie 600 y 700, compatibles con procesadores Intel Alder Lake-S y Raptor Lake-S, son compatibles con módulos de memoria DDR5 de 24 GB y de 48 GB, es decir, con módulos de alta densidad de memoria. Esto significa que admiten una enorme cantidad de memoria RAM, y que en aquellos modelos que cuentan con cuatro ranuras DIMM podemos instalar un máximo de 192 GB de DDR5.

Si lo que te preocupa es la velocidad puedes estar tranquilo, ya que estas placas base soportan también configuraciones de hasta 48 GB de memoria RAM en dos módulos de 24 GB cada uno (doble canal) a una velocidad máxima de 7 GHz con latencias CL40, y son compatibles con perfiles Intel XMP y AMD EXPO, lo que se traduce en un soporte completo y en una flexibilidad total.

Para un usuario normal que utilice su equipo para jugar contar con 16 GB de RAM es suficiente para asegurar una buena experiencia, aunque ya empieza a ser recomendable tener 32 GB para garantizar un buen rendimiento en cualquier situación, y con cualquier juego, especialmente a largo plazo. Con esto en mente, es probable que te preguntes qué sentido tiene entonces montar 48 GB de RAM o incluso 192 GB de RAM.

La respuesta es muy sencilla, tiene sentido en aquellos casos en los que los usuarios utilizan su equipo no solo para jugar, sino también para trabajar, porque existen tareas y aplicaciones que tienen un enorme consumo de memoria RAM y que, al final, pueden consumir más de 100 GB de RAM cuando trabajamos con proyectos especialmente complejos. Autodesk 3Ds Maxes una de esas aplicaciones, y un excelente ejemplo de lo que os acabo de decir.

Al ofrecer una densidad de memoria de hasta 192 GB de DDR5 en sus placas base, GIGABYTE refuerza el valor de su plataforma como una solución más versátil y flexible, capaz de dar lo mejor de sí tanto en manos de usuarios que solo quieren disfrutar de sus juegos favoritos como de aquellos que quieren dar forma a un equipo para trabajar y jugar con todas las garantías, incluso con aplicaciones muy exigentes.