YouTube experimenta con unos 1080p mejorados para los usuarios de Premium

YouTube puso en marcha en 2022 un experimento con el que establecía la resolución 4K como una característica exclusiva para los suscriptores de su plan Premium, pero la polémica que generó dicha medida hizo que diera marcha atrás. Sin embargo, la plataforma no se rinde y ha puesto en marcha un nuevo experimento con una versión premium de la resolución 1080p.

Como no podía ser de otra forma viendo el precedente con el 4K, los responsables de la plataforma han salido rápido al paso para explicar lo que están haciendo con el nuevo experimento en torno a la resolución 1080p. Paul Pennington, portavoz de la compañía subsidiaria de Google (o Alphabet), ha explicado para el medio The Verge que “1080p Premium es una versión de 1080p con una tasa de bits mejorada que proporciona más información por píxel, lo que se traduce en una experiencia de visualización de mayor calidad”.

Dicho con otras palabras, la resolución 1080p no va a ser eliminada de la experiencia estándar de YouTube, la cual está presente para los usuarios registrados que no son de pago y los que entran en la plataforma sin cuenta registrada. Por ahora la nueva característica solo está disponible para una limitada cantidad de usuarios de YouTube Premium, plan de suscripción que en estos momentos cuesta 11,99 euros al mes desde España.

A pesar de que la resolución 1080p seguiría estando disponible para los usuarios que consumen los contenidos sin pagar el plan de suscripción, las preocupaciones en torno a una posible degradación de la experiencia con dicha configuración han empezado a surgir y no sin motivos, aunque la compañía ya ha dicho que no habrá cambios con la experiencia estándar.

1080p, como bien sabrán nuestros lectores a estas alturas, hace referencia a la resolución de 1.920×1.080 píxeles, la más popular entre los monitores de PC a pesar de que va cuesta abajo desde hace años. Sin embargo, que un vídeo tenga una resolución de 1080p no significa que tenga buena calidad de imagen de por sí, y ahí es donde entran factores como la tasa de bits y la profundidad del color.

Según explica The Verge, un vídeo a 1080p almacenado en un Blu-ray es capaz de proporcionar una tasa máxima de 40 megabits por segundo, mientras que la de YouTube a la misma resolución oscila entre 8 y 10. Aquí influyen factores como el códec con el que se comprime el vídeo, el cual ofrecerá una mejor calidad conforme más eficiente sea. Por otro lado, una mayor tasa de bits, al menos en un principio, permitiría mejorar la calidad de la imagen, y el hecho de que la resolución seleccionada para el plan Premium sea 1080p hará la experiencia llegue a más personas al estar más cerca de lo que usa la mayoría de la gente a través de PC y móviles.

Otro aspecto a tener en cuenta es que YouTube no muestra los ficheros de vídeo que son subidos a su tasa máxima de bits debido a que es costoso tanto a nivel de servidor como de cliente. Cuanto menor sea la tasa de bits, menor será la calidad de imagen del vídeo, pero también el ancho de banda que ocupa en la transmisión desde los servidores de la plataforma hasta el cliente, que puede ser una aplicación o un navegador web.

Veremos cómo acaba este nuevo experimento de ofrecer una experiencia mejorada con la resolución 1080p para los usuarios de YouTube Premium. Llegue o no a buen puerto al final, parece que este intento está bastante mejor tirado por parte de la plataforma.