¿Juego sucio contra Wikileaks?

La fiscalía sueca acaba de emitir una orden de busca y captura bajo cargos de violación y agresión sexual contra Julian Assange, el fundador de la página de internet Wikileaks, el portal web independiente que publica informes anónimos y documentos filtrados con contenido sensible en materia religiosa, corporativa o gubernamental. Assange, fue implicado en agosto en una investigación por violación y fue absuelto poco después de esas acusaciones. Ahora, de nuevo se reabre el caso cuando Wikileaks sigue publicando material comprometido.

Sin pretender entrar a valorar acusaciones o cargos tan graves como una violación sí sorprende que la fiscalía sueca haya vuelto a reabrir un caso en el que ya estuvo implicado y absuelto el fundador de Wikileaks. La petición de la fiscalía sueca será analizada por un tribunal de Estocolmo y puede acabar en una orden de búsqueda y captura esta vez internacional.

Un caso que huele cada vez peor y que vuelve a salir a la luz cuando el fundador de Wikileaks no se ha arrugado ante las presiones y amenazas y tras la publicación de 90.000 documentos confidenciales sobre la guerra de Afganistán demostrando que gobiernos implicados como el estadounidense ocultaron y mintieron sobre las operaciones, el portal está publicando otros 400.000 documentos esta vez sobre la guerra de Irak.

Considerado como ‘la garganta profunda’ de Internet, Wikileaks lleva desde finales de 2006 publicando en la Red de redes documentos confidenciales, y aunque se centra en países con regímenes totalitarios también acoge filtraciones que desvelen comportamientos no éticos por parte de gobiernos y empresas occidentales.

Un altavoz muy incómodo que ha tenido que mudar sus servidores a un bunker nuclear ante las presiones de quien pretenden silenciarlo. Esperemos que no a cualquier precio como parece tras la reapertura de un caso contra su fundador que huele realmente mal.