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Análisis

El cofundador de Google quiere coches voladores

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Desde hace décadas la idea de los coches voladores ha sido uno de los avances más recurrentes tanto en series de dibujos animados como en películas de corte futurista, pero en el mundo real es algo que todavía está bastante lejos de llegar a materializarse, al menos bajo su concepto más avanzado.

Sin embargo a pesar de las complicaciones que presenta su atractivo es muy grande y parece que ha llamado la atención de Larry Page, uno de los fundadores de Google, quien según informaciones procedentes de diversas fuentes ha invertido unos 100 millones de dólares en dos empresas conocidas como Zee.Aero y Kitty Hawk, ambas inmersas en el desarrollo de un prototipo de coche volador.

Los primeros datos indican que esos prototipos ya existen pero que estarían en una etapa muy temprana, ya que uno de ellos vendría a ser en esencia una pequeña aeronave con espacio para una persona y propulsores en la zona trasera, mientras que el otro se habría basado en el sistema que utilizan los cuadricópteros.

Como vemos esas descripciones los colocan en una posición bastante alejada de la idea de un coche volador «de verdad», aunque imaginamos que con ambos prototipos habrán cumplido el primer objetivo de encontrar una base simple sobre la que ir trabajando y puliendo detalles.

Iremos viendo cómo evoluciona todo esto, ya que aunque la idea es interesante hay más dudas que respuestas y no sólo en cuanto a su desarrollo e implantación, sino también en relación al alto precio que podrían acabar teniendo los primeros coches necesarios y la formación y seguros necesarios para poder conducirlos.

Más información: Neowin.

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