Cinco mentiras sobre el Wi-Fi que debemos superar

Las mentiras sobre el Wi-Fi se mantienen casi como una especie de mantra, y esto se debe, en gran media, al efecto rebote que producen de forma recurrente tanto ciertos como usuarios como algunos medios «especializados». En algunas ocasiones puede ser más correcto hablar de medias verdades que de mentiras, pero al final estas se acaban deformando de tal manera que se convierten en eso, en mentiras.

Somos conscientes de las consecuencias negativas que pueden producir entre nuestros lectores muchas de esas mentiras sobre el Wi-Fi, y por ello nos hemos animado a dar forma a este artículo, en el que os invitamos a descubrir cinco de esas mentiras. Nos hemos centrado en las más populares y extendidas, pero si os queda cualquier duda podéis dejarla, como siempre, en los comentarios, y estaremos encantados de ayudaros.

1.-Mentiras sobre el Wi-Fi: siempre es mejor conectarse por cable

Hay gente que cree que el Wi-Fi siembre es peor que el cable, y que siempre debemos priorizar el segundo tipo de conexión. Esto no es así, nos encontramos ante un caso de verdad a medias que, como dijimos al principio, se ha deformado de tal manera que se ha convertido en una mentira.

Las conexiones cableadas nos permitirán disfrutar de una conexión a Internet más estable, limpia y con un rendimiento más consistente, pero esto no quiere decir que sean la única opción y que debamos mirar al Wi-Fi con malos ojos.

Una conexión Wi-Fi 5, por ejemplo, puede cubrir sin problemas las necesidades de casi cualquier tipo de usuario, siempre que se encuentre dentro de unos niveles de alcance y de interferencias aceptables. Por ejemplo, en casa tengo dos PCs conectados a un router por cable, pero utilizo dos televisiones 4K, una PS4 y dos smartphones conectados vía Wi-Fi 5 y nunca he tenido un problema, ni siquiera visualizando contenidos 4K en streaming en ambas televisiones a la vez.

2.-Mentiras sobre el Wi-Fi: no es seguro

Es una de las mentiras sobre el Wi-Fi más extendidas. Muchos usuarios, en especial aquellos menos experimentados, creen que vulnerar una red Wi-Fi es muy fácil, pero la realidad es totalmente distinta, siempre que se cumpla, eso sí, una condición muy sencilla: que esté unida a una contraseña segura.

La mayoría de los casos en los que se produce un acceso no autorizado a una conexión Wi-Fi la culpable acaba siendo una contraseña fácil de romper, bien porque sea muy corta y muy simple, o bien porque es una contraseña genérica que se encuentra en las principales bases de datos de contraseñas utilizadas para lanzar ataques de fuerza bruta.

Si utilizas una conexión Wi-Fi y la contraseña es «1234567» el problema no está en la seguridad de la conexión Wi-Fi como tal, sino en que has empleado una de las primeras contraseñas que utilizaría cualquier persona que intente vulnerar la seguridad de una red inalámbrica. Cambiar la contraseña por defecto y utilizar letras, números, mayúsculas y símbolos puede marcar una gran diferencia.

3.-Mentiras sobre el Wi-Fi: no pasa nada por utilizar varios estándares

No es verdad, de hecho sucede todo lo contrario. Cualquier router actual mantiene un alto grado de compatibilidad con estándares antiguos, pero esto no significa que sea buena idea utilizarlos.

Si activamos el estándar Wi-Fi 1, también conocido como 802.11b o Wi-Fi B, la velocidad de nuestra conexión a Internet se reducirá enormemente. Esto se debe a que se trata de un estándar heredado en el que cada paquete tarda mucho más en completar el ciclo de envío, y reduce de forma global el rendimiento de nuestra conexión bajo el resto de estándares.

En definitiva, lo mejor es mantener los estándares antiguos desactivados y limitados al Wi-Fi 4 y al Wi-Fi 5.

4.-Mentiras sobre el Wi-Fi: la red de 5 GHz siempre es la mejor opción

Es verdad que con la llegada del Wi-Fi 5 se produjo un aumento enorme de las velocidades de transferencia y de la estabilidad de las conexiones inalámbricas, siempre que nos mantengamos en unas distancias razonables, pero esto no quiere decir que sean siempre la mejor opción.

Una de las desventajas más importantes que tiene el Wi-Fi 5 frente al Wi-Fi 4 es su alcance. El segundo puede cubrir distancias superiores, lo que lo convierte en una excelente opción para llega a aquellos rincones más alejados de nuestro hogar.

De nuevo os pongo un ejemplo. En el punto más alejado de mi hogar el Wi-Fi 5 llega con una intensidad tan pobre que no puedo conectarme a Internet. Sin embargo, si me conecto a través de Wi-Fi 4 la cosa cambia por completo, y obtengo la señal necesaria para navegar por Internet sin problemas.

5.-Mentiras sobre el Wi-Fi: la posición del router es algo secundario

Una de las mentiras sobre el Wi-Fi que más problemas causa, y precisamente una de las más fáciles de resolver y que más puede mejorar nuestro Wi-Fi. Algunos usuarios creen que no importa la colocación del router, otros piensan que hay que colocarlo libre de obstáculos, y que lo demás da igual, pero ninguna de las dos ideas es acertada.

Es verdad que tenemos que situar el router en un lugar donde esté libre de obstáculos, pero esto no es suficiente para conseguir una colocación óptima. También debemos buscar un punto elevado, ya que las ondas del Wi-Fi tienen forma de dónut y se irradian en 360 grados.

Obvia decir que debemos evitar obstáculos cercanos, y también hay que intentar colocar el router lejos de electrodomésticos que puedan generar interferencias. Los espejos y las peceras son también un enemigo natural del Wi-Fi.

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