Conecta con nosotros

Noticias

Ingenuity se separa con éxito de Perseverance

Publicado

el

Ingenuity se separa con éxito de Perseverance

Aunque al hablar de la misión Mars Perseverance inmediatamente pensamos en el rover, no debemos olvidar a Ingenuity, el pequeño helicóptero que acompaña al laboratorio rodante en el cráter Jezero, que como te contamos hace unos días lleva un fragmento del Flyer-1 de los hermanos Wright, que además es una muestra más de cuán lejos puede llegar el software libre, y que aspira a ser el primer dispositivo creado por el ser humano que vuele en un planeta que no sea la Tierra, algo mucho más complejo de lo que pueda parecer en un primer momento.

Siguen en marcha, de momento, los preparativos para el primer vuelo del Ingenuity en Marte, y hace solo unas horas hemos sabido que, tras un viaje en el que rover y helicóptero han recorrido juntos 471 millones de kilómetros, Perseverance e Ingenuity se han separado por primera vez, cuando el pequeño artefacto volador se ha desenganchado del rover para posarse, ya en solitario, sobre la superficie marciana. Completada esta operación, el rover ha comenzado a alejarse lentamente de él, como puedes comprobar en la imagen.

El primer desafío al que se enfrentará ahora el Ingenuity no tiene que ver con el vuelo, sino con la temperatura. Un día cálido en esa región de Marte es equiparable a uno gélido en la Tierra, y el Ingenuity podría tener que soportar temperaturas tan bajas como -90 grados centígrados. Un desafío tanto para su integridad estructural (muchos materiales no son capaces de soportar temperaturas tan bajas, como desgraciadamente recordó la NASA tras el accidente del Challenger) como para la carga de su batería, responsable de mantener la temperatura y que, de no estar correctamente aislada, podría venirse abajo muy rápidamente.

La noche es, por lo tanto, la primera gran prueba de fuego a la que se enfrenta Ingenuity, y aunque es evidente que el equipo de ingeniería responsable de la misma habrá tenido muy en cuenta todos los factores ambientales para su diseño, hablamos de una condiciones extremadamente hostiles, por lo que el menor fallo de cálculo o cualquier descuido, por irrelevante que pueda parecer, puede acabar (de momento) con los planes de la NASA de hacer volar un helicóptero en Marte.

Si por el contrario, y como todos esperamos, Ingenuity resiste las gélidas temperaturas nocturnas de Marte, proseguirán los preparativos para su primer vuelo, planificado en primera instancia para el 11 de abril. Cualquier incidente, o incluso dudas razonables, pueden postergar esta fecha, y lo mismo ocurrirá con los vuelos posteriores si el primero se ejecuta con éxito. De darse esta feliz circunstancia, se planea intentar ejecutar hasta cuatro vuelos más durante un periodo de 30 soles (días marcianos).

El pequeño helicóptero tiene una misión muy importante: comprobar si sabemos lo suficiente de la superficie de Marte como para poder hacer volar un dispositivo de ese tipo allí. Cuenta con una cámara y podrá enviar sus grabaciones al rover, que a su vez las enviará a la Tierra. Así, de concluir sus pruebas con éxito, los científicos e ingenieros de la NASA podrán empezar a trabajar en futuros proyectos más ambiciosos, en los que los sucesores del Ingenuity sean capaces de desarrollar más tareas, cuenten con una mayor autonomía, puedan ascender más en la superficie, cuenten con más sensores, etcétera.

Y es que un ingenio volador avanzado que acompañe un rover, puede servir de asistencia al mismo para recopilar información sobre las zonas a investigar por el laboratorio rodante, explorar zonas inaccesibles para el rove (barrancos, montañas, etcétera), realizar prospecciones aéreas de zonas para futuros aterrizajes (quizá incluso para el establecimiento de una primera base en la década que viene)… Igual que el Flyer-1, pese a que solo se elevó unos metros por una corta distancia, Ingenuity puede ser solo el primer paso de la exploración aérea de otros planetas.

 

Imagen: NASA / JPL – Caltech

Si me dieran una cana por cada contenido que he escrito relacionado con la tecnología... pues sí, tendría las canas que tengo. Por lo demás, música, fotografía, café, un eReader a reventar y una isla desierta. ¿Te vienes?

Lo más leído