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Zhemao y el problema de Wikipedia

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Zhemao y el problema de Wikipedia

Wikipedia es, sin discusión posible, uno de los proyectos más interesantes surgidos de Internet. Una enciclopedia abierta y colaborativa, en la que cualquier persona puede colaborar aportando su conocimiento y que democratiza por completo el acceso libre a la información. A quienes nos criamos en los tiempos en los que las enciclopedias todavía ocupaban estanterías completas de nuestros hogares, ver toda esa información, y muchísima más, accesible a un simple click de ratón, se nos hace un avance sensacional.

Wikipedia cuenta con la friolera cantidad de más de 6,458 millones de entradas en inglés, más de 1,755 millones en español, y cifras igualmente monstruosas en otros idiomas. Es, a día de hoy, el mayor repositorio de información de carácter general y, a diferencia de lo que ocurría con las enciclopedias domésticas, lo más común es que la información se actualice rápidamente cuando se producen cambios. Lo dicho, algo que no habríamos podido imaginar hace unas pocas décadas.

Sin embargo el modelo no es perfecto, y de una de sus principales virtudes también pende uno de sus principales defectos. La inmensa mayoría de los artículos pueden ser editados por cualquier persona, ni siquiera es necesario estar registrado en Wikipedia para poder crear una nueva entrada o modificar una ya existente, algo que da cabida a las buenas intenciones de la mayoría, pero también a otras de tono más avieso por parte de otras.

El último ejemplo de este tipo de actitudes lo encontramos en una información publicada por Vice, en la que podemos leer que un ama de casa china se dedicó, durante años, a falsificar la historia de Rusia en la edición en chino de Wikipedia. Poco a poco, y de manera muy elaborada, esta mujer, que se identificaba en Wikipedia con el nombre de usuario Zhemao, habría creado nada menos que 206 artículos plagados de información falsa, que durante años pasó por auténtica.

Zhemao y el problema de Wikipedia

El principio del fin de las fechorías de Zhemao se produjo cuando el novelista chino Yifan leyó una de sus entradas e, interesado por la información de la misma, que pretendía emplear en una de sus novelas, quiso ampliar información al respecto. Con el artículo de Wikipedia en la mano, acudió a expertos que, sorprendidos por dicha publicación, le indicaron que aquella información no era cierta. Entonces llegó el momento de empezar a tirar del hilo.

Un punto importante de este engaño es que Zhemao habría escrito entradas muy completas y, además, las habría enlazado entre sí, creando lo que podríamos definir como una estructura de la información muy bien entretejida. Así, este engaño va mucho más allá de otros que hemos visto previamente en Wikipedia, pero que afectaban a una única entrada en concreto. En este caso, gracias a lo elaborado de la mentira, estas entradas habrían pasado desapercibidas durante años.

La cuenta de Zhemao, así como otras cuentas secundarias empleadas por la misma persona, habrían sido bloqueadas de manera permanente, y un amplio equipo de editores de Wikipedia estaría todavía revisando todo lo publicado y editado por esta persona. Y es que a lo largo de todos estos años, ha podido editado otras muchas entradas, cuya información ahora queda en entredicho hasta que sea confirmada por expertos.

El caso de Zhemao es un tanto extremo, pero nos recuerda de una manera muy contundente que no deberíamos fiarnos, sin más, de lo que veamos publicado en Wikipedia. Hace ya unos años, uno de los creadores de Wikipedia puso en cuestión la enciclopedia e, incluso, llegó a recomendar no utilizarla, al tiempo que hizo por poner el foco en su nuevo proyecto, otra enciclopedia online pero en la que se emplean las cadenas de bloques para combatir las informaciones falsas y sesgadas. Y es una pena, pero quizá la única solución para Wikipedia pase por adoptar medidas similares o parecidas para proteger la veracidad de los contenidos. De lo contrario, su fiabilidad puede acabar perdiendo muchos enteros.

Si me dieran una cana por cada contenido que he escrito relacionado con la tecnología... pues sí, tendría las canas que tengo. Por lo demás, música, fotografía, café, un eReader a reventar y una isla desierta. ¿Te vienes?

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