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Twitter se lo pone difícil a los investigadores

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Twitter se lo pone difícil a los investigadores

Como recordarás, hace algo más de una semana se confirmó que Twitter iba a empezar a cobrar por el uso de su API, una más de las múltiples medidas adoptadas por la red social desde la llegada de Elon Musk para intentar mejorar sus números. No es común que servicios de este tipo cobren por acceso a sus APIs, por lo que la sorpresa fue mayúscula y, a día de hoy, son muchos los análisis que se siguen haciendo sobre un movimiento que, al menos en principio, no apunta a que vaya a suponer una diferencia apreciable en las cuentas de la red social.

Con el anuncio del «cierre» del acceso gratuito a la API, Twitter también anunció que se establecería un nuevo plan «barato» para poder seguir empleando sus funciones sin tener que asumir las tarifas existentes en ese momento, que partían de los 149 dólares mensuales para un volumen de 500 peticiones a los servidores de Twitter. Como ya te contamos entonces, en el otro extremo se encontraban los 2.499 dólares al mes por 10.000 peticiones. Precios, en todos los casos, muy lejos de lo que se pueden permitir muchos de los usuarios que empleaban, hasta hace poco más de una semana, el acceso gratuito a la misma.

Finalmente, esta semana hemos sabido que Twitter comenzará a ofrecer acceso básico a su API por 100 dólares al mes, si bien parece que la compañía todavía está terminando de ajustar los diversos planes de acceso que ofrecerá, incluyendo sus precios, por lo que no parece probable, pero aún se puede producir algún cambio a este respecto. Sería más que deseable que esto ocurriera y que fuera a la baja pero, como digo, parece bastante poco probable.

Twitter se lo pone difícil a los investigadores

Así, con estas nuevas condiciones, The Verge pone el foco en un asunto particularmente preocupante de este cambio, y es en los más que nocivos efectos que puede tener el acceso exclusivamente de pago a la API de Twitter en el mundo de la investigación y el periodismo. Hasta ahora, buena parte de la conversación sobre los efectos de esta medida ha tenido que ver con los servicios que se han visto afectados, pero no debemos olvidarnos de que muchas investigaciones del ámbito social se han llevado a cabo gracias al acceso abierto y gratuito a los datos, algo en lo que la API es fundamental.

Así, desde investigadores hasta periodistas de datos, pasando por herramientas como las que intentan determinar si una cuenta es real  o es un bot, podrían no seguir llevando a cabo sus actividades si no les resulta posible afrontar el pago del acceso a la API.

Si me dieran una cana por cada contenido que he escrito relacionado con la tecnología... pues sí, tendría las canas que tengo. Por lo demás, música, fotografía, café, un eReader a reventar y una isla desierta. ¿Te vienes?

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