Adiós, Ingenuity: el primer helicóptero que enviamos a Marte ha cumplido su misión

Ingenuity fue el primer helicóptero que voló sobre la superficie de nuestro vecino rojizo, y lo hizo con un objetivo muy importante, demostrar que era posible realizar un vuelo propulsado y totalmente controlado en la atmósfera de Marte sin ningún tipo de problema. Este vehículo fue capaz de superar las expectativas de sus creadores, ya que al final realizó muchos más vuelos de los que estaban planeados inicialmente.

Es importante que tengamos en cuenta que la atmósfera de Marte es mucho menos densa que la de la Tierra (alrededor de 100 veces menos), y que la gravedad en dicho planeta equivale solo a un 37% de la gravedad de nuestro planeta, lo que significa que cualquier cosa allí es mucho más ligera, y que por tanto necesitará de mucha menos potencia para moverse, pero también de un control más preciso y cuidadoso.

En un principio este helicóptero iba a servir como demostración tecnológica en Marte realizando un total de 5 vuelos en un periodo de 30 días. Ese era el objetivo, pero al final esta aeronave, que como dije ha sido la primera que ha logrado volar en otro mundo, se ha mantenido operativa durante casi tres años, ha realizado nada más y nada menos que 72 vuelos y se mantuvo en el aire más de dos horas.

Gracias a estas pruebas los investigadores han obtenido una información muy valiosa sobre las claves aerodinámicas para operar en la superficie de Marte, y con ellos han podido perfilar mucho mejor las características que deben cumplir las futuras aeronaves que recorrerán el cielo marciano en próximas misiones. El valor del trabajo de Ingenuity es inestimable.

Todos sus vuelos salieron a la perfección hasta que el 18 de enero se produjo un fatídico desenlace. El helicóptero inició un nuevo vuelo sobre la superficie de Marte, y tras alcanzar los 12 metros de altura y mantenerlos durante casi 5 segundos inició su descenso. Por desgracia, cuando se encontraba a 1 metro de distancia de la superficie perdió contacto con el rover y se precipitó al suelo.

Debido a la caída se perdió la conexión con Ingenuity hasta el día siguiente. Cuando volvieron a hacer contacto la NASA recuperó la información que este había recopilado, y confirmó que una de sus aspas se había roto, lo que marcó el final de su aventura sobrevolando la superficie marciana. Su despedida es ya una realidad, aunque como he dicho este helicóptero se despide por la puerta grande, ya que realizó 14 veces más vuelos de los que estaban inicialmente planeados.