Vendido cartucho de Super Mario Bros por más de cien mil dólares

El coleccionismo puede mover mucho dinero. Lo teníamos claro, pero la venta de un cartucho de Super Mario Bros en perfecto estado ha conseguido subir el listón hasta tal punto que ha marcado un nuevo récord: 100.150 dólares.

Normalmente cuando hablamos de cartuchos de consolas de 8 y 16 bits es fácil pensar que aquellos más populares serán los que tendrán precios más elevados. Super Mario Bros es, sin duda, uno de los juegos más míticos y  más importantes de la consola NES de Nintendo, pero su valor depende de muchos factores.

Esto quiere decir que aunque tengamos un cartucho de Super Mario Bros en perfecto estado no significa que vayamos a conseguir una gran cantidad de dinero por él, ya que al ser tan popular también existen en el mercado una gran cantidad de unidades.

¿Qué es lo que hace entonces que un cartucho de Super Mario Bros pueda llegar a venderse por 100.150 dólares? El hecho de que esté sin abrir y en perfecto estado influye, pero lo verdaderamente determinante en este caso ha sido la pegatina situada en su zona superior que confirma que esta unidad en concreto fue de las primeras que se produjeron y distribuyeron en Estados Unidos entre 1985 y 1986. Las copias de esa primera etapa no iban envueltas en plástico, solo selladas con esa pegatina.

Si leemos entre líneas esto equivale a una gran exclusividad, ya que fue a partir de 1986 cuando la producción se estandarizó y se aceleró de manera considerable, lo que acabó dando pie a que Super Mario Bros llegase al mercado con un total de once cajas diferenciadas, y obviamente cada una tiene su propio valor para los coleccionistas.

Coleccionar videojuegos puede llegar a ser muy complicado, puesto que hay muchos aspectos a tener en cuenta a la hora de valorar un juego, y también puede ser muy caro. Hay plataformas, como por ejemplo Neo Geo AES, que tiene títulos listados con precios estratosféricos incluso aunque no vengan en su caja original ni sean ediciones completas, y lo mismo ocurre la mayoría de los sistemas clásicos de los 80 y de los 90.

Sé que muchos de nuestros lectores se preguntarán qué sentido tiene pagar tanto dinero por juegos que puedes disfrutar a través de consolas digitales o de emuladores, y la explicación es simple: el coleccionismo va más allá de la idea de jugar,, y en algunos casos, como el que nos ocupa, se limita al concepto de inversión en su sentido más puro.