El precio de la memoria RAM sigue descendiendo

Corren buenos tiempos para cambiar de PC o para actualizar el actual. Ya hablemos de memoria RAM, de tarjeta gráfica o de otros componentes, tras algo más de un año de precios por las nubes, poco o nulo stock y un mercado de reventa que ahora, con un poco de suerte, se estará comiendo su stock con reducción de vinagre balsámico de Módena con guarnición de patatas asadas, los precios están siguiendo la tendencia que ya llevábamos tiempo esperando.

Hoy mismo hemos visto varias noticias sobre ello, como el descenso de precio de las AMD Radeon 6000 incluso por debajo del precio recomendado por el fabricante, así como de la complicada situación de los mineros, que ahora pretenden inundar el mercado con las tarjetas gráficas que  compraron para montar sus granjas, y parece que el mercado de la memoria RAM, que ya nos dio buenas noticias hace unas semanas, mantiene y mantendrá, al menos a corto plazo, esa misma tendencia.

Al menos eso es lo que podemos leer en TechPowerUP, donde nos cuentan que a la bajada de precios de la memoria RAM del segundo trimestre de este año, se sumará un movimiento similar durante el tercero, es decir, que al menos hasta septiembre la previsión es que tanto la memoria RAM DDR4 como la DDR5 seguirán viendo bajar sus precios, si bien lo harán a distinta velocidad.

Según los datos mencionados, la media indica que durante este segundo trimestre el precio de la memoria RAM DDR4 ha descendido entre un 3% y un 8%, mientras que la DDR4 lo ha hecho entre un 0% y un 5% (si bien hemos visto datos que señalaban una bajada aún mayor), a lo que se suma la predicción de que durante julio, agosto y septiembre se invertirán los términos, es decir, que la memoria RAM DDR5 descenderá entre un 0% y un 5%, mientras que la DDR4 lo hará de una manera algo más acusada, con entre un 3% y un 8%.

Así, salvo sorpresas, podemos mantener nuestra predicción de que el segundo semestre de este 2022 será un momento especialmente bueno para todas las compras en este sentido. Más aún si tenemos en cuenta que en este periodo debutarán las nuevas generaciones de procesadores de AMD y de Intel, y de tarjetas gráficas de AMD, de Intel y de NVIDIA, lo que seguramente se traducirá en alguna bajada de precio adicional de los componentes de la generación actual. Si a esto sumamos la bajada de precios de la memoria RAM, y también la de las memorias SSD, el plan es más que prometedor.