Windows 11 21H2 da problemas con Red Dead Redemption 2

Microsoft ha reconocido un problema que afecta a Windows 11 21H2, y que se ha identificado tras el lanzamiento de la actualización KB5023774, cuyo despliegue ha tenido lugar justamente hoy. Tras instalar esa actualización con dicha versión de Windows 11 el juego Red Dead Redemption 2 sufre un fallo que impide su ejecución desde el launcher de Rockstar.

El gigante de Redmond no ha explicado exactamente por qué se produce este fallo  con Windows 11 21H2 tras instalar esa actualización, se ha limitado a describir el fallo indicando que se produce ese fallo en la ejecución de Red Dead Redemption 2, y que el botón de jugar pasará a «cargando», y tras el fallo volverá a mostrar la opción jugar.

Para solucionar este problema ahora mismo solo tenemos una opción, y es actualizar a Windows 11 22H2. Esto es un problema en sí mismo porque dicha actualización también ha venido dando problemas desde su lanzamiento. Sé que en teoría la mayoría de los problemas quedaron solucionados con la actualización KB5020044, que fue lanzada a mediados de diciembre, pero es una versión que no goza de la misma madurez que la 21H2, y al final esto acaba representando un cierto riesgo.

En Microsoft ya se encuentran investigando lo ocurrido, así que cabe la posibilidad de que tarde o temprano acaben liberando un parche o listando una solución que permita solventar este problema sin tener que actualizar a Windows 11 22H2. Si estás teniendo problemas con Red Dead Redemption 2 en Windows 11 21H2 ahora mismo solo tienes dos opciones, esperar a que se publique una solución o actualizar a Windows 11 22H2.

No hay duda de que esta es otra prueba más de que Microsoft tiene que hacer algo con su modelo de actualizaciones, porque no es normal que siempre que lanza un nuevo parcheo una nueva actualización semestral estos salgan de la fase de pruebas con problemas graves que no han sido identificados, y que acaban sufriendo en sus carnes los usuarios finales. Estos no son «beta testers», y esperan que cuando llega una actualización a su sistema operativo, que es uno de los pilares de cualquier PC, esta funcione correctamente.

Sé que lanzar actualizaciones debidamente optimizadas y con una compatibilidad garantizada para distintos tipos de PC configurados con hardware diverso es complicado, pero ese fue el modelo que eligió Microsoft, y ya va siendo hora de que sea capaz de ofrecer un mínimo de actualizaciones con un nivel de calidad aceptable, y libres de errores graves en sus versiones finales.