PIRG pide a Microsoft la extensión del soporte de Windows 10

PIRG ha lanzado una campaña que pide a Microsoft que amplíe el soporte de Windows 10 para evitar «causar el mayor aumento en el número de computadoras chatarra jamás vista».

PIRG es una federación de Grupos de Interés Público estadounidense. Una organización importante, que se financia y funciona de manera independiente, con miembros en todo el país y lobby en el Congreso. Suele involucrarse en la defensa de los usuarios en temas de interés público relacionados con la salud, la seguridad, el medio ambiente y en general el bienestar de los ciudadanos.

Aunque pueda sorprender, han considerado que el soporte de Windows 10 es relevante en términos del ‘derecho a reparar’ para no aumentar la basura electrónica. La petición es directa, «Dile a Microsoft: no deje atrás millones de computadoras.

«Estimado director ejecutivo de Microsoft, Satya Nadella.

No deseches millones de computadoras. La decisión de Microsoft de poner fin al soporte de Windows 10 podría causar el mayor aumento en el número de computadoras desechadas hasta la fecha y hacer imposible que Microsoft alcance sus objetivos de sustentabilidad. La nueva versión [Windows 11] con estrictos requisitos de hardware podría provocar que el 40% de los PCs en uso queden rezagados.

La decisión de Microsoft de dejar de dar soporte a millones de computadoras funcionales en nuestros hospitales, empresas y hogares es un trato injusto para los clientes que esperan que sus costosos dispositivos duren. Todo software llega a un punto en el que ya no es compatible, pero cuando las consecuencias para nuestro medio ambiente son tan grandes no deberíamos aceptarlo».

Veremos la respuesta de Microsoft… Pero es claro que tenemos un problema, los usuarios y Microsoft. Windows 10 va camino de convertirse en «otro Windows 7», cuando el desastre de Vista hizo que decenas de millones de computadoras no migraran de sistema operativo. La situación actual es similar. Dos años después del lanzamiento de Windows 11, su cuota de mercado no acaba de remontar y cuando finalice el soporte de Windows 10 decenas de millones de ordenadores se quedarán sin actualizaciones de seguridad, obsoletos vía software y aumentando el gravísimo problema de basura electrónica.

A pesar de la promoción de actualización gratuita, de que todos los PCs nuevos se entreguen con Windows 11 preinstalado o de que Microsoft ya no venda licencias de Windows 10, la cuota no aumenta en los términos necesarios como para poder abandonar Windows 10. Una gestión caótica de los requisitos de hardware (inflados artificialmente); fallos en las actualizaciones; promesas de características incumplidas; rendimiento mejorable y en definitiva porque Windows 11 no va más allá de un «Windows 10 tuneado», son responsables de una situación que un grupo como PIRG ha considerado abordar con esta campaña.

El calendario oficial de Microsoft de soporte de sistemas contempla el final de la vida útil de Windows 10 en octubre de 2025.