Nintendo Switch 2 ya debería haber llegado, podría haber sido mejor

El lanzamiento de Nintendo Switch 2 podría retrasarse al primer trimestre de 2025. En esa dirección apuntan varias informaciones, aunque este no era el plan original que tenía la compañía japonesa. En teoría, el lanzamiento de esta consola se iba a producir en algún momento de 2023, pero Nintendo fue postergando el lanzamiento hasta tal punto que hasta NVIDIA habría quedado desconcertada.

La razón de ese desconcierto es muy sencillo, si se hubiera desarrollado Nintendo Switch 2 con el plan de lanzarla en 2025 desde el principio esta consola podría haber mejorado notablemente, y habría podido utilizar un nodo mucho más avanzado. La fuente de esta información dice que esta consola utilizará un SoC fabricado en el nodo de 8 nm, y que de haberse ajustado el desarrollo a un lanzamiento en 2025 dicho SoC podría haber dado el salto a un nodo más pequeño, lo que habría mejorado el rendimiento, la eficiencia y los costes.

Se baraja la posibilidad de que Nintendo Switch 2 haya recibido algún tipo de cambio debido a ese retraso en su lanzamiento para mejorar su hardware, y para convertirlo en una configuración más acorde a 2025, pero esto solo es un rumor, así que no está garantizado. Personalmente, y teniendo en cuenta los costes que representarían un cambio de nodo, creo que es muy probable que esta consola acabe manteniendo el nodo de 8 nm, y que no hayan cambios en este sentido.

Qué podemos esperar de Nintendo Switch 2

Ahora mismo la información que tenemos apunta a una configuración bastante interesante que marcaría un salto grande frente al modelo actual. El SoC estaría diseñado por NVIDIA y fabricado por Samsung en 8 nm y contaría con una CPU ARM con entre 8 y 12 núcleos. Su GPU sería una solución basada en Ampere y personalizada por NVIDIA con entre 1.280 y 1.536 shaders, compatible con NVIDIA DLSS Super Resolution y Ray Reconstruction.

Esa GPU podrá acelerar trazado de rayos, y tendrá una potencia aproximada de 4 TFLOPs en FP32 funcionando en modo dock, lo que la colocaría en competencia directa con Xbox Series S. En dicho modo sus frecuencias de trabajo serán mayores, y el rendimiento será superior al modo portátil, algo que también ocurre con la Nintendo Switch. El núcleo gráfico se apoyará en un sistema de memoria unificada basada en LPDDR5X.

Se espera que Nintendo Switch 2 cuente con entre 8 GB y 16 GB de LPDDR5X. No se ha concretado nada todavía, pero las filtraciones más recientes dentro de la cadena de suministros indican que esta consola podría contar al final con 12 GB de LPDDR5X. Sería una configuración óptima para mover juegos de la generación actual sin problemas.

La unidad de almacenamiento de esta consola será de tipo UFS 3.1, tendrá una capacidad mínima de 256 GB, y ofrecerá una velocidad de lectura secuencial de 2.100 MB/s. Esto la colocaría casi al mismo nivel que Xbox Series X y Series S, ya que ambas cuentan con una unidad SSD capaz de alcanzar una velocidad de 2.400 MB/s.

En general, lo importante es que incluso en el peor de los casos Nintendo Switch 2 va a suponer una evolución muy grande frente al modelo original, y que será una consola de nueva generación de pleno derecho gracias  a esa GPU NVIDIA basada en la arquitectura Ampere.

Imagen de portada generada con IA.