Cómo saber qué placa base tiene mi PC sin tener que entrar en la BIOS

La placa base es el componente sobre el que se instalan y al que se conectan, de una forma u otra, todos los componentes que dan vida a un PC. Esta sirve como nexo de unión entre todos esos componentes, permite que interactúen entre sí y les da el soporte que necesitan para poder funcionar correctamente, tanto a nivel de físico (conectividad y alimentación) como digital (firmware y microcódigo).

Sin una placa base sería imposible montar un PC, y de ella dependen cosas tan importantes como los procesadores que podremos utilizar, la memoria RAM compatible tanto por tipo como por capacidad, las interfaces y tecnologías de conectividad que tenemos disponibles y las ampliaciones que podremos hacer a lo largo de los años, entre otras muchas cosas. Es uno de los pilares centrales de cualquier PC, aunque es cierto que no siempre le damos la importancia que merece, y que todavía suele pasar bastante desapercibida.

Tanto es así que muchos usuarios de PC no tienen realmente claro qué placa base utilizan, mientras que otros directamente desconocen hasta el fabricante de la misma. Esto es muy fácil de comprobar, solo tienes que preguntarle a varios conocidos que tengan un ordenador por la placa base que monta el mismo y verás como muchos no saben qué decirte. Si les preguntas por el procesador probablemente acertarán a decirte al menos si se trata de un modelo Intel o AMD, pero con las placas base esto es menos frecuente.

Por qué es importante saber qué placa base tengo

Hay muchas razones, la verdad. Una de las más importantes es que saberlo te permitirá tener claro qué componentes podrás utilizar y qué ampliaciones podrás hacer en caso de que sea necesario. También tendrás claros qué componentes elegir en caso de que algunos sufran una avería y tengas que sustituirlos. Imagina, por ejemplo, que se estropea el procesador de tu PC pero la placa base sigue funcionando, si no sabes qué modelo tienes no sabrás qué procesador deberías comprar.

Por ejemplo, una placa base con chipset AMD B450 y socket AM4 solo te permitirá montar procesadores Ryzen 5000 e inferiores, y te limitará a memoria DDR4. Por contra, una placa base con chipset B650 y socket AM5 te dará la oportunidad de montar procesadores Ryzen 7000 y APUs Ryzen 8000G, y soporta memoria DDR5. Si no tienes esa información estarás perdido, y no sabrás ni siquiera qué tipo de RAM es compatible con tu placa base.

Nuestra placa base determina igualmente las opciones de conectividad y a los puertos disponibles. Así, puede que nuestra placa base solo cuente con un conector M.2, lo que significa que si ya tenemos uno instalado y compramos otro no podremos utilizarlo. Cada placa base ofrece también unas características específicas, como soporte de overclock a nivel de CPU y RAM, y recibe sus propias actualizaciones de BIOS. Saber qué modelo exacto tenemos es clave para poder descargar e instalar las actualizaciones compatibles que estén disponibles.

Todo lo que os acabado de explicar nos permite entender, de una manera simplificada, por qué es tan importante elegir bien la placa base de nuestro PC, porque puede limitarnos en muchos aspectos e incluso afectar negativamente al rendimiento de ciertos componentes, tanto de forma física como por falta de compatibilidad con los estándares más avanzados.

Cómo puedo saber qué placa base tengo sin tener que entrar en la BIOS

Si eres de los que tiene pánico a la BIOS tranquilo, que es muy fácil identificar nuestra placa base sin tener que entrar en ella. La manera más rápida y directa es pulsar la tecla de Windows, escribir «Ejecutar», entrar en el primer resultado y escribir «msinfo32» sin comillas. Nos aparecerá la ventana que vemos en la imagen adjunta, donde se encuentran recogidos tanto el fabricante de nuestra placa base como el modelo de la misma.

En caso de que quieras obtener más información sobre tu modelo hay numerosas aplicaciones gratuitas que te permitirán obtenerla con unos pocos clics, y sin tener que ponerte a desmontar el PC ni entrar en la BIOS. Una de las más útiles es CPU-Z, y también es de las más ligeras y fáciles de utilizar que existen ahora mismo. Podemos descargarla en segundos sin ningún tipo de coste, y entrando en la pestaña «Mainboard» podremos ver cosas como:

• El fabricante de la placa base.
• El modelo exacto.
• La versión de PCIe soportada.
• El chipset concreto y la revisión.
• La versión de la BIOS que estamos utilizando y la fecha de la misma.
• La interfaz que utiliza nuestra tarjeta gráfica, tanto por versión de PCIe como por líneas.

Puede que esa información extra tampoco sea suficiente para ti y que quieras profundizar en otros aspectos. Si es tu caso tranquilo, que con todo lo que tienes ahora mismo puedes recurrir directamente a la web del fabricante de tu placa base para conseguir muchos más datos. En la web oficial tendremos un listado completo de las especificaciones de la placa base, y también una descripción general de sus características, incluyendo temas de diseño, refrigeración y calidad de construcción.

Es muy sencillo, introduce el nombre de tu placa en un buscador de Internet y entra en el resultado del fabricante oficial. Navega por la interfaz y entra en la opción especificaciones para tener un listado completo y detallado de sus características. Si tienes cualquier duda no resuelta siempre puedes contactar con el soporte técnico del fabricante de tu placa.