La GPU Arctic Sound de Intel tendrá una variante para juegos

Arctic Sound es el nombre con el que se conoce provisionalmente a uno de los proyectos más importantes de Intel a largo plazo, una GPU dedicada que según las últimas informaciones podría marcar un salto importante en términos de rendimiento y contar con una versión concebida específicamente para juegos.

Los que nos leéis a diario sabéis que Intel arrastra un interés importante en el sector gráfico desde hace varios años, y que ha llevado a cabo numerosos esfuerzos para intentar suplir de una u otra forma sus carencias en dicho mercado. En este sentido uno de los más importantes ha sido el fichaje de Raja Koduri, el antiguo jefe del grupo Radeon de AMD y uno de los ingenieros más conocidos dentro del mundo GPU.

Sabíamos que la llegada de Koduri a Intel podría depararnos algo grande y las primeras informaciones lo confirman, ya que en teoría Arctic Sound utilizará una arquitectura totalmente nueva y alejada de lo que hemos visto en las GPUs integradas de la presente generación, y además marcará una auténtica apuesta por el gaming.

Todavía no tenemos muchos detalles y es normal ya que Arctic Sound no llegará al mercado hasta 2020, pero numerosos rumores apuntan a que esta arquitectura dará forma a la generación 12 de gráficas Intel (las HD 630 se encuadran en la 9.5) y que adoptará una estructura interna tipo MCM con un EMIB (Embedded Multi-Die Interconnect Bridge) que le permitirá comunicar directamente con el procesador.

Dicho de otra forma, Arctic Sound se integrará en un módulo multi-chip siguiendo el esquema que hemos visto en las soluciones con CPU Intel Core y GPU Radeon RX Vega, lo que significa que ofrecerá un rendimiento muy superior al de las soluciones integradas y que podría venir acompañada de memoria gráfica dedicada.

Más información: WCCFTech.