Los procesadores Intel Raptor Lake-S consumirán menos que los Intel Alder Lake-S

El lanzamiento de los procesadores Intel Raptor Lake-S no tendrá lugar hasta finales de 2022 o principios de 2023, pero gracias a numerosas filtraciones y rumores tenemos cada vez más información sobre esta nueva generación de CPUs de alto rendimiento que, como sabrán muchos de nuestros lectores, será la sucesora de Alder Lake-S, cuya llegada está prevista para finales de este año.

Alder Lake-S supondrá un avance importante porque será la primera generación de CPUs de alto rendimiento de Intel que utilizará, en casi todos sus modelos, un diseño híbrido con núcleos de alto rendimiento y núcleos de alta eficiencia. Ya vimos, por ejemplo, que el Core i9-12900K tendrá, en teoría, 8 núcleos Golden Cove (Core) con tecnología HyperThreading, y 8 núcleos Gracemont (Atom) sin dicha tecnología, lo que nos deja 24 hilos en total.

Intel Raptor Lake-S mantendrá ese mismo diseño, es decir, utilizará también una arquitectura híbrida con dos bloques de núcleos, uno de alto rendimiento y otro de alta eficiencia, y estará fabricada en proceso de 10 nm, aunque bajo la nueva nomenclatura del gigante del chip se identificará como «Intel 7», un nombre que obedece, como vimos, a su densidad de transistores, que está por encima del nodo de 7 nm de TSMC.

Consumos: Intel Raptor Lake-S traerá algunas mejoras

Cuando hablamos del consumo de un procesador, debemos diferenciar el estado concreto del mismo que estamos valorando, ya que una CPU no consumo lo mismo cuando funciona a su frecuencia base y con una carga determinada que cuando activa el modo turbo y funciona a máxima potencia. El estado PL1 es el que utiliza Intel en el listado de especificaciones oficial de sus procesadores, y mide el consumo de energía estable a largo plazo. Su importancia es tan grande que define el TDP de cada procesador, así que si el TDP de una CPU es de 125 vatios, su PL1 serán 125 vatios.

Por otro lado, el PL2 representa el consumo máximo de energía a corto plazo de un procesador. Es un valor superior al PL1, ya que en este caso se aplica una carga intensa de trabajo y entran en juego los modos turbo, una variante importante que no está presente en el modo PL1, y que nos deja un valor más realista del consumo de un procesador cuando afronta tareas diversas e intensas. La diferencia entre ambos puede llegar a ser muy grande. También existen los niveles PL3 y PL4, que miden niveles máximos de consumo, es decir, picos absolutos que ocurren con muy poca frecuencia.

Ahora que tenemos claro esto, estamos listos para entrar a ver una información que ha compartido Igor´s Lab, un medio que fue conocido anteriormente como la versión alemana de Tom´s Hardware. Dicho medio ha compartido los valores PL1, PL2 y PL4 de los procesadores Intel Alder Lake-S y de los Intel Raptor Lake-S, y encontramos algunas diferencias significativas que merece la pena tener en cuenta.

Los procesadores Alder Lake-S tendrán un PL1 de 125 vatios, 65 vatios y 35 vatios, y un PL2 de 188 vatios (241 vatios en rendimiento), 126 vatios (202 vatios en rendimiento) y 78 vatios (106 vatios en rendimiento). En PL4, esos valores suben a 283 vatios (359 vatios en rendimiento), 195 vatios (311 vatios en rendimiento) y 131 vatios (171 vatios en rendimiento). Como vemos, los picos máximos de consumo trabajando a plena carga pueden ser muy altos.

En el caso de los procesadores Intel Raptor Lake-S, los valores PL1 se mantendrán en 125 vatios, 65 vatios y 35 vatios, pero los niveles PL2 pasarán a ser de 188 vatios (253 vatios en rendimiento), 133 vatios (219 vatios en rendimiento) y 80 vatios (106 vatios en rendimiento). En PL4, las cifras pasan a ser de 238 vatios (314 vatios en rendimiento), 179 vatios (277 vatios en rendimiento) y 118 vatios (152 vatios en rendimiento. De media, tendríamos una reducción del 19%, 9% y 11% en los valores PL4 en la serie Intel Raptor Lake-S, y un aumento en los valores PL2 del 5%, 5,5% y 2,5%.