Nuestros lectores hablan: ¿Qué os parece la vuelta de Intel al sector gráfico?

Ayer os dimos toda la información sobre el regreso de Intel al sector gráfico. La compañía de Santa Clara nos dio una gran sorpresa con Intel Arc Alchemist, su primera generación de soluciones gráficas de alto rendimiento para el sector gaming, y también generó una gran expectación con Ponte Vecchio, una aceleradora gráfica que ofrecerá hasta 45 TFLOPs de potencia en FP32, y que promete marcar un punto de inflexión en el sector a través de la especialización.

Centrándonos en sus soluciones para gaming, vimos que Intel lanzará la primera generación de tarjetas gráficas dedicadas Arc Alchemist durante el primer trimestre del año que viene, y estas estarán diseñadas para competir, en teoría, con las soluciones más potentes de NVIDIA y AMD. Toda la gama de Intel partirá de la misma base, el núcleo gráfico Intel Xe HPG, lo que significa que todas sus tarjetas gráficas vendrán con hardware dedicado para acelerar trazado de rayos, y con motores de matriz, conocidos también por las siglas XMX, que se ocuparán de acelerar la carga de trabajo que supondrá el XeSS.

La tecnología XeSS ha sido, sin ninguna duda, una de las novedades más interesantes. Sabíamos que Intel estaba trabajando en su propio reescalado inteligente, pero no teníamos claro si este iba a ser capaz de estar al nivel del DLSS de NVIDIA. Tras ver la presentación del pasado miércoles, tengo que claro que es muy probable, ya que parte del mismo concepto y no es un simple reescalado espacial con una capa de realce, como el FSR de AMD, sino que utiliza inteligencia artificial y recurre tanto a vectores de movimiento como al historial de fotogramas.

Quiero explicaros un poco esto, porque entiendo que no todos tendréis claro lo que representa. Al reconstruir y reescalar una imagen, necesitas toda la información que puedas obtener para que el proceso ofrezca el mejor resultado posible. Al utilizar vectores de movimiento, y al recurrir al historial de fotogramas, es posible predecir mucho mejor todos los elementos de la escena a reproducir en el nuevo fotograma que vamos a generar mediante reconstrucción. Sin esa información, podrían producirse errores gráficos, pérdida de detalle e incluso la desaparición de elementos que deberían estar presentes. En la imagen adjunta podéis ver un ejemplo claro.

Intel ha mostrado una tecnología prometedora, pero el soporte, y el precio, serán dos claves importantes

Por lo que hemos podido ver hasta el momento, todo parece indicar que Intel va a estar a la altura tanto en rendimiento bruto como en soporte de tecnologías avanzadas. Sin embargo, tengo dos dudas importantes que, por desgracia, no podré resolver hasta que se produzca el lanzamiento de esta nueva generación de tarjetas gráficas.

La primera está relacionada con el soporte y el aprovechamiento del Intel XeSS en juegos triple A. ¿Veremos una amplia utilización de dicha tecnología y una rápida adopción de la misma? Intel ha confirmado que ofrecerá kits de desarrollo para poder implementarla de una manera más sencilla, tanto en su modalidad XMX como en la DP4a, pero esto no garantiza nada ya que, al final, son los desarrolladores lo que tienen que hacer el trabajo.

Por otro lado está el tema del precio. Con el panorama actual, y los precios inflados que tienen todas y cada una de las tarjetas gráficas disponibles, sería fantástico que Intel fuese capaz de romper la tendencia y de lanzar nuevos productos a un precio realmente competitivo, y razonable. ¿Lo conseguirá? Pues todo dependerá del nivel de suministro que sea capaz de ofrecer, y de la demanda que tengan sus soluciones gráficas. En cualquier caso, creo que Intel tiene una oportunidad de oro por la propia realidad del mercado, y que debería hacer todo lo posible por aprovecharla.

Ahora os toca a vosotros, ¿qué opináis del regreso de Intel al sector gráfico? Los comentarios son vuestros.